_
_
_
_
_

Unos traficantes secuestraron a dos personas por tirarles droga por el retrete

Denuncia por desaparición

Tres colombianos secuestraron durante un día a dos compatriotas -una mujer y un hombre- por vaciar una bolsa llena de cocaína por el retrete, según explicó ayer un portavoz de la Jefatura Superior de Policía de Madrid. Los secuestradores y supuestos traficantes de droga exigieron un rescate de casi tres millones de pesetas por la liberación de sus dos rehenes. La policía les sorprendió en un piso de la calle de San Fortunato con los rehenes y les detuvo.Luis Fernando P. G., colombiano de 35 años, compartía piso con tres mujeres de su misma nacionalidad. Ellas no sabían que él se dedicaba, supuestamente, al tráfico de droga. Entre ellos surgieron problemas de convivencia y trataron de echarle hace cinco días.

Entablaron una discusión entre los cuatro y, como él se negó a hacer el petate y abandonar la casa, ellas comenzaron a vaciarle la habitación. En plena faena de recogida, las mujeres descubrieron que su compañero de piso tenía una bolsa con una sustancia polvorienta, de color blanco. Al sospechar que se trataba de cocaína, cogieron la bolsa y vaciaron su contenido por el retrete.

Luis Fernando montó en cólera. Las amenazó de muerte: "Voy a llamar a los de mi banda y os vamos a matar", aseguró, según declararon ellas en comisaría. Luis Fernando se marchó del piso hecho una furia en busca de sus compañeros. Su amenaza asustó a las mujeres, y dos de ellas recogieron sus pertenencias y huyeron de la vivienda instantes después de que él se marchara. La tercera, Lisset C. W., llamó a un amigo para que le ayudara a sacar sus pertenencias de la vivienda, mucho más pesadas. Mientras recogían los enseres, los tres supuestos traficantes entraron en el piso y les retuvieron. No se supo nada más de ella durante todo el día.

Ella hablaba con su padre a menudo y él se extraño al no recibir su llamada. Entonces se dirigió a la comisaría de Arganzuela para denunciar la desaparición de su hija. El Grupo XII de la Brigada, especializado en secuestros y extorsiones, se hizo cargo de la investigación. Los agentes se pusieron en contacto con las dos compañeras de la secuestrada y les contaron lo ocurrido.Otros conocidos de Lisset le dijeron a la policía que había sido secuestrada y que sus captores exigían 2,8 millones de pesetas por su liberación. Los agentes acudieron al piso y el amigo de Lisset, el que acudió a ayudarla para trasladar sus pertenencias, les abrió la puerta. Con gestos, les comunicó que un secuestrador estaba en la vivienda.

Los agentes entraron en el piso y detuvieron a Luis Fernando. Luego aguardaron en la entrada del inmueble a que llegaran los otros dos supuestos secuestradores para detenerles. Luis Fernando ya había recibido 1,1 millones para liberar a la mujer y su amigo.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_