Aragón insta al Congreso a que reconozca el matrimonio gitano

Las Cortes de Aragón, acogiéndose al artículo 87 de la Constitución Española, serán las impulsoras del reconocimiento del rito gitano como una de las formas legales de matrimonio reconocidas en España. Ayer, el Parlamento regional, a iniciativa del PSOE, aprobó una proposición de ley que será remitida al Congreso de los Diputados, para promover una ley estatal que reconozca este rito milenario como una forma más de contraer matrimonio. También votaron a favor de la iniciativa el Partido Aragonés Regionalista, la Chunta e IU. El PP se abstuvo.La diputada socialista Encarna Mihi dijo que las Cortes de Aragón "no sólo reconocen y respetan la especificidad de un colectivo muy numeroso en España, sino que ejercen su derecho constitucional y refuerzan el grado de autonomía política de nuestro Parlamento, que pone de manifiesto el interés de Aragón en cuestiones que afectan a una parte de la sociedad española".

La iniciativa, presentada el pasado 2 de marzo, parte de una asociación nacional, Kamira, que preside una mujer gitana de Zaragoza: Pilar Clavería, La Rona. Clavería preside también la Federación de Asociaciones Gitanas de Aragón.

Ahora se trata de que el Congreso convalide un rito milenario, que sigue celebrando más del 90% de los gitanos. José Luis Merino, un notario zaragozano impulsor de la propuesta, recordaba el pasado 2 de marzo que una sentencia del Tribunal Superior de Cataluña, en la que se negaba la pensión de viudedad a una gitana, que únicamente había celebrado su matrimonio por este rito, les había llevado a dar a conocer su intención.

Ocho meses después, el propósito es ya una realidad. El PP ha argumentado que "no tiene justificación alguna convalidar una unión amparándose en la etnia y calcando un texto elaborado en un despacho ajeno a estas Cortes". Pero el resto de los grupos parlamentarios replica que con ese texto legal "se trata de integrar en lo cotidiano lo que es habitual en un pueblo que convive con los españoles desde el siglo XV. Es una forma de respeto a su cultura".

El texto aprobado ayer se ampara en la Ley Orgánica de Libertad Religiosa de 1980 y en un acuerdo suscrito por el Estado en 1992 con protestantes, judíos y musulmanes, por el que se reconoce en el registro civil los matrimonios celebrados por esas religiones en sus respectivos ritos.