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Un líder de la Intifada muere alcanzado por tres misiles israelíes

El Ejército de Israel ha iniciado la caza de los dirigentes militares de la Intifada. El primero en caer abatido alcanzado ayer por tres misiles israelíes en Beit Sahur, cerca de Belén, ha sido Husein Abayat, de 37 años, jefe de la milicia palestina Tanzim en el sur de Cisjordania y dirigente local del partido gubernamental palestino Al Fatah. La operación provocó la indignación de la milicia palestina, que ha amenazado con vengar su muerte y asesinar al jefe del Estado Mayor israelí, el general Saul Mofaz.

Un helicóptero de combate israelí disparó ayer por la mañana tres misiles contra una camioneta en la que viajaba el dirigente local de la milicia Tanzim y de Al Fatah, provocando su muerte, hiriendo a dos viajeros del vehículo y causando asimismo heridas mortales a otras dos mujeres que caminaban en aquel momento por la acera. La operación se produjo en una de las calles más céntricas del pueblo de Beit Sahur -7.000 habitantes-, situado al sur de Belén, en la cual se encuentran alineados diversos edificios que sirven de escondite y de trinchera a los francotiradores palestinos, quienes cada noche acosan desde allí a las tropas israelíes de un acuartelamiento cercano.Un militante local de Al Fatah manifestaba ayer su ira y se hacía eco del comunicado oficial de la organización en la provincia de Belén, que anuncia que se vengará la muerte de su dirigente y tratarán de asesinar al jefe del Ejército israelí. El comunicado está firmado por los Halcones de Fatah, una de las organizaciones paramilitares más radicales del partido gubernamental palestino en las que se ha concentrado un sector de disidentes de la milicia Tanzim, opuestos a la línea de mando de Marwan Barghouti.

La operación militar contra el dirigente de la milicia Tanzim provocó el pánico en esta pequeña ciudad cristiana. Las tiendas cerraron inmediatamente sus puertas y los maestros prefirieron enviar a los niños con sus padres. Por unas horas, la población quedó absolutamente desierta y paralizada como si temiera el regreso de los helicópteros israelíes. La tensa espera seguía ayer por la noche, mientras la gente permanecía encerrada en sus casas.

Israel justificó ayer la operación al asegurar que Husein Abayat era el responsable directo de los tiroteos que desde hace cuatro semanas se producen prácticamente a diario contra la comunidad judía del barrio de Gilo, en las fronteras de Jerusalén. El mando israelí le imputa también haber promovido ataques contra las tropas israelíes acuarteladas en Beit Sahur. Israel utilizó en el atentado contra Abayat métodos de combate sofisticados: misiles teledirigidos y disparados desde un helicóptero en pleno vuelo, capaces de alcanzar un blanco de manera casi perfecta.

El atentado mortal contra Husein Abayat se produjo pocas horas antes de que el presidente Yasir Arafat se reuniera con Bill Clinton en Washington. Con esta entrevista, la Casa Blanca iniciaba una ofensiva diplomática que culminará el domingo con una reunión con el primer ministro israelí, Ehud Barak. Estas reuniones tienen dos objetivos: lograr la aplicación real de un alto el fuego y encarrilar el proceso de paz.

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