_
_
_
_
_

Malestar entre los docentes ante el juramento exigido por el obispo Reig

Certificado de idoneidad

Directores de diversos colegios públicos de Castellón han mostrado su extrañeza por la exigencia del juramento de fidelidad y profesión de fe a los maestros de religión por parte del obispo de la diócesis de Segorbe-Castellón, Juan Antonio Reig Pla. El obispo ha enviado a unos 130 profesores de religión una misiva en la que exige que firmen una profesión de fe y fomenten "la disciplina común de toda la Iglesia", lo que ha causado malestar entre los docentes afectados.Los directores de los colegios públicos consideran inaudito que se les exija un voto de obediencia no sólo a las creencias cristianas, sino también a la opinión de cualquiera de los miembros de la jerarquía eclesiástica. Así, la directora del colegio público La Marina de Castellón, Dolors Ibáñez, opina que "no es de recibo la exigencia del obispado de la diócesis de Segorbe-Castellón". Por su parte, el director del centro Pintor Castell, Antonio Torrent, afirma que este compromiso de fidelidad "es más propio de otro tiempo, cuando los maestros debían rubricar el juramento del Movimiento, que de finales del siglo XX".

La diócesis de Segorbe -Castellón pide a los 130 profesores de religión de la provincia un compromiso firmado para poder ejercer su labor. Según cita textualmente el texto, los profesores deben prestar cristiana obediencia a los obispos y guardar siempre, tanto de palabra como en la forma de actuar, la comunión con la Iglesia Católica. Este juramento, que debe realizarse con los evangelios en la mano, se firmó por primera vez el año pasado. Con anterioridad no se exigía esta rúbrica, a pesar que el compromiso de fidelidad fue aprobado por la Conferencia Episcopal en 1991. Desde este curso, la competencia de valorar los requisitos para la docencia de los maestros de religión ha pasado a la Consejería de Cultura, en estrecha colaboración con la Iglesia.

Varios directores de colegios públicos de la capital de la Plana han reconocido que existe malestar entre los profesores de religión, por tener que firmar el documento. Los maestros consideran que ya es suficiente con el Certificado de Idoneidad Eclesiástica que reciben de la Conferencia Episcopal, por haber aprobado la asignatura optativa de religión en el transcurso de la carrera. Según la directora del colegio La Marina, estos maestros "se muestran conformes con seguir la doctrina católica e impartir sus enseñanzas, pero consideran que es excesivo jurar fidelidad, obediencia y disciplina a la jerarquía eclesiástica". Además, el director del colegio Carles Selma, Juli Montañés, afirma que los profesores de religión "no se han mostrado muy conformes con la firma del documento".A la Consejería de Cultura le corresponde desde este año la valoración de los requisitos para la docencia a propuesta de la diócesis, y no le consta la existencia del juramento. El obispado de Segorbe-Castellón no ha realizado manifestaciones al respecto.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_