El grupo Zei vuelve a mostrar su descontento en su segundo disco
Más de tres lustros después de que el llamado rock radikal vasco revolucionara la escena musical con sus proclamas de herencia punk, aún hay grupos que continúan utilizándolas para dar rienda suelta a su insatisfacción. Uno de ellos es Zei, que ahora ha puesto en circulación su segundo elepé: Entre enfermos no hay contagios (Discos Suicidas).Esa frase, atribuida a un indígena peruano, es el título genérico que el cuarteto de Getxo ha puesto a una selección de canciones que hablan de escasas perspectivas sociales, de la pesadilla que supone la drogadicción, de su descontento con la clase política, de las tropelías cometidas por los dictadores suramericanos y dejan asomar cierta vena ecologista. Una temática que casa perfectamente con una instrumentación que bebe del rock más básico para construir raciones de rock urbano, con regusto punk, a la sombra de Los Suaves, Barricada o Reincidentes.
