El jurado del 'crimen de Ikaztegieta' delibera si los tres acusados son culpables

El jurado que juzga a los tres acusados por la muerte de Izaskun Larrauri, la empleada de la gasolinera de Ikaztegieta que falleció de un disparo en 1997, se reunió en la tarde de ayer para deliberar sobre la culpabilidad o no de los procesados. Los tres se enfrentan en conjunto a peticiones de más de 70 años de cárcel, tanto del fiscal como de la acusación particular, mientras que sus abogados defensores mantuvieron en su alegato final que las acusaciones no han presentado pruebas definitivas que inculpen a sus clientes.

Seis mujeres y tres hombres iniciaron ayer tarde sus deliberaciones, que seguían al cierre de esta edición, sobre la responsabilidad de Juan Antonio García, de 23 años, Pedro María Ruiz, de 20, y Ana Borja, de 28, en la muerte de Izaskun Larrauri. El presidente del tribunal, Juan Piqueras, entregó al jurado el objeto del veredicto, en el que figuran las preguntas que sus nueve miembros deberán responder para que resolver si todos o alguno de los acusados participaron en el atraco y muerte de la empleada de la estación de servicio.Las acusaciones no variaron la petición de condena para los procesados. Tanto fiscal como acusación particular mantuvieron que sus declaraciones inculpatorias en la instrucción de la causa son determinantes. Consideran que otra prueba básica es la declaración de un testigo protegido, antiguo compañero de celda de Juan Antonio García, quien dijo que el inculpado había reconocido su participación en el asalto y posterior crimen. El acusado le dijo también, según dicho testigo, que la empleada se tiró al suelo y que él disparó. El día que Izaskun Larrauri fue asesinada desaparecieron de la caja 108.000 pesetas.

Los abogados defensores justificaron el silencio de sus clientes en la vista porque nada tenían que decir en el juicio y señalaron que era responsabilidad de las acusaciones presentar pruebas inculpatorias. De las 19 huellas que recogió la Ertzaintza en el lugar de los hechos ninguna se corresponde con las de los procesados y tampoco se encontró el arma del crimen.

La Fiscalía de la Audiencia de San Sebastián pide para Juan Antonio García, presunto autor del disparo, penas que suman 26 años de prisión, mientras que para Pedro Giménez y Ana Borja reclama 18 años para cada uno de ellos. Además solicita cinco años por robo y uno por uso de armas. Las defensas piden la libre absolución.