Anguita advierte a su sucesor de que IU estará sola en la izquierda, donde no sitúa al PSOE

Julio Anguita, todavía como coordinador general de Izquierda Unida hasta que mañana domingo sea sustituido, quizá deliberadamente no hizo un testamento político al intervenir para hacer el balance de su labor y la de su equipo durante estos tres últimos años. Dio cuenta de sus aciertos y sus errores y, sobre todo, lanzó una advertencia a su sucesor para que esté precavido: IU estará sola ya que no podrá contar con el PSOE. "Por lo que se escucha en determinados foros se ve venir que esta fuerza política se encontrará en plena soledad". Sus intérpretes aseguran que se refería a los discursos del nuevo secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, que considera poco izquierdistas.

No será la última vez que Anguita tome la palabra en esta sexta asamblea dado que durante la mañana de hoy cumplirá su última obligación, cual es dar respuesta a los discursos políticos que hayan ido desgranando los responsables de cada federación de Izquierda Unida sobre lo que han sido estos tres años. Pero el aún coordinador general empezó a despedirse por la mañana con una conferencia de prensa en la que, por primera vez, confesó sus sensaciones personales del trato que ha recibido en los 12 años que ha sido responsable de esta fuerza política. "Desde Adolfo Suárez he sufrido los mayores ataques que pueda recibir un político, desde dentro y desde fuera", dijo Anguita.No lo dijo en tono dramático y tampoco tuvo reproches hacia los medios de comunicación, aunque sí afirmó que con éstos había tenido "encontronazos". Y añadió que las filtraciones a la prensa son "indeseables, antidemocráticas" e impropias de la izquierda.

Pero si para Anguita ha habido un enemigo externo poniendo piedras en su camino, también denunció los "intentos desde dentro de debilitar" a la coalición. Aun así, Izquierda Unida ha supuesto, en su opinión, "la experiencia más interesante de la izquierda española de los últimos años".

Ni palabra de Euskadi

Pasadas las nueve de la noche, Julio Anguita se dirigía al plenario y cuando terminó, una hora después, no había mencionado ni al PSOE ni al País Vasco. En su informe de gestión escrito, sí figura todo un epígrafe dedicado a Euskadi pero el todavía líder de Izquierda Unida no lo mencionó. Es verdad que Anguita dio por supuesto que todos los presentes se habían leído el informe de gestión en el que se habla del País Vasco.Fue al final cuando todos entendieron que Anguita no ve posibilidades de que Izquierda Unida se entienda con el PSOE. "Fuera nos esperan muchos problemas y uno se ve venir, a juzgar por lo que se escucha en determinados foros que indican que Izquierda Unida estará en completa soledad". Personas de su entorno le tradujeron e identificaron "foros" con la conferencia que el líder del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, pronunció hace diez días en el Club Siglo XXI, quedándose, sobre todo, con aquello del "socialismo liberal o libertario" que Zapatero propugna.

En estos tres años las relaciones con el PSOE han tenido muchos altibajos para terminar casi sin hablarse después de que a los dos les fuera muy mal en su pacto a medias para las elecciones generales del pasado mes de marzo.

La unidad de acción

Anguita recordó que la V Asamblea celebrada hace tres años culminó con la aprobación de impulsar "la unidad de acción de la izquierda". Durante un año hubo reuniones y trato fluido, que culminó con propuestas conjuntas en un documento con 40 páginas. Luego vino el silencio y el intento citado de acuerdos quince días antes de las elecciones del pasado 12 de marzo.No encontró Anguita necesario extenderse sobre las derrotas electorales porque ya figuran en el informe y, sobre todo, porque ha consumido muchas energías de esta organización en los últimos meses. Quizá por eso el líder saliente de IU quiso dejar a los suyos un mensaje de ánimo para trabajar y para que "se renazca con una propuesta de izquierda".

Aunque todo el mundo sabe que apoya a Gaspar Llamazares, Anguita pidió a los delegados que el lunes, al terminar el Congreso, todos apoyen al ganador. "Salga quien salga tendrá mi apoyo más respetuoso", aseguró.