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Subterfugios

¿No aprenderán nunca en Whitehall? El ministerio británico de Sanidad ha hecho una etérea afirmación señalando que el riesgo de que los niños vacunados contra la polio con una vacuna sospechosa de poder transmitir el mal de las vacas locas es "incalculablemente pequeño" y ha demostrado así que sigue sin aprender. Ya nos han embaucado antes con este tipo de explicaciones. Es la forma que tienen de decir: "Sí, vale, hay riesgo, pero es pequeño; no podemos medirlo, y si pudiéramos, no hay razón para alarmarse. Creédnos".Pero no lo hacemos. (...) Sus afirmaciones emanan de una cultura del secretismo que nos lleva de desastre en desastre. (...) Hace diez años que nos dijeron que la carne de vacuno británico era adecuada para el consumo y desde entonces se han confirmado 175.000 casos del mal de las vacas locas, y la factura que llevamos pagada con nuestros impuestos es de 4.000 millones de libras esterlinas. Los médicos más enterados dejaron de comer carne de vacuno bastante antes de que saltaran las alarmas para el público. (...) La vacuna contra la polio es tan importante para la protección de los niños frente a una enfermedad mortal que no debe convertirse en una cuestión que levante sospechas y fomente las especulaciones, en la que haya gente que sepa más que el resto sobre el problema. (...) La cultura endémica de secretismo y de mantenimiento del búnker practicada en Sanidad ha torpedeado la reputación tanto de conservadores como de laboristas en su ejercicio del poder. (...) Ambos partidos asumen esta cultura cuando les viene bien.

, 22 de octubre

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