Mujeres contra el cáncer de mama

Han sorteado a la muerte y le han ganado la partida. Hablan de su enfermedad con sorna, se ríen y ofrecen ayuda a esas mujeres que como ellas un día llegaron a la consulta de un médico y se hundieron cuando les comunicaron que tenían un tumor maligno. Forman parte de la Asociación de Mujeres Afectadas de Cáncer de Mama y Ginecológico Katxalin de Guipúzcoa.A Charo Beovide, de 65 años, le descubrieron un tumor en 1984 y se muestra tan vitalista que es capaz de arrastrar al resto de las asociadas a cualquier aventura. "Tenemos que lograr quitar leña a ese fuego que es relacionar cáncer con muerte y queremos ser un soporte social importante para la mujer afectada", dice. En Euskadi la principal causa de la muerte de las mujeres es el cáncer de mama y por ello se abogan por un detección precoz de la enfermedad para ser atajada. "Hay que tener una actitud positiva para enfrentarse a la enfermedad; un 50% de su resolución depende de nosotras y el resto, de la medicina. Aquí tenemos una atención sanitaria muy buena", asevera Beovide.

A Magdalena, de 42 años, le detectaron la enfermedad hace siete meses; dos antes había enterrado a su padre por un cáncer. "Lo he pasado mal y hay veces que me cuesta hasta sonreír, pero estoy aquí y hay que pensar que la vida es levantarse cada día y seguir luchando". Asegura que su encuentro con otras mujeres que habían pasado por la misma situación le ha ayudado mucho. No se ha reconstruido el pecho. "Ahora sería imposible. No quiero volver a pasar por un quirófano". Sin embargo, sus compañeras de mesa - cortan y elaboran lazos rosas para recaudar dinero durante el fin de semana - le animan a ello: "Vas a poder ponértelas del tamaño que quieras", bromean.

María Ángeles, de 69 años, ha luchado en dos ocasiones contra los tumores malignos, la primera hace 10 años y la segunda hace cinco. Nunca ha pensado que podía morir de cáncer. "El primer tumor maligno que me localizaron fue a los seis meses de morir mi marido de cáncer. Tenía que luchar para no ver a mis hijas sufrir y no lo pasé tan mal", dice.

Cerca de 250.000 mujeres vascas han participado en los últimos cinco años en el programa de detección de cáncer de mama impulsado por el Gobierno autónomo, que ha servido para detectar 1.196 tumores de este tipo. En 1995, Osakidetza puso en marcha en Álava el programa de detección precoz de cáncer de mama, que extendió dos años después a Vizcaya y Guipúzcoa. El proyecto del Departamento de Sanidad está dirigido a mujeres de entre 50 y 64 años, que en la comunidad autónoma ascienden a unas 190.000.

María Ángeles, Rita, Charo o Magdalena son algunas de las miles de mujeres que están mastectomizadas en Euskadi.

Más información en www.euskalnet.net/katxalin.