El presidente Aznar pedirá en Irán respeto a los derechos humanos

El presidente del Gobierno, José María Aznar, que llegó anoche a Teherán en visita oficial, abordará hoy el conflictivo tema del respeto a los derechos humanos en las entrevistas que tiene previsto mantener con los dirigentes iraníes, según afirmaron ayer fuentes diplomáticas. La UE, que normalizó relaciones con Irán en 1997, tras el triunfo electoral del ala aperturista dirigida por el ayatolá Mohamed Jatamí, sigue apoyando las resoluciones críticas al respecto que se votan en la ONU, y que Irán considera como una injerencia en su soberanía.No obstante, la visita de Aznar tiene un sentido de "claro apoyo" a esta alternativa aperturista, según fuentes de La Moncloa, aunque el presidente español verá también al líder espiritual iraní, el ayatolá Alí Jamenei, cabeza del sector conservador.

En la agenda de la visita destacan también las crisis de Oriente Próximo y el petróleo, así como el desarrollo de las relaciones bilaterales, tanto culturales como económicas. La delegación española incluye a 47 representantes de empresas que ya tienen intereses en Irán, como Repsol, Foster Wheeler, Técnicas Reunidas o Mecánica de la Peña. La cuestión que afecta al terrorismo es considerada "superada" por la parte española, a pesar de que EE UU mantiene a Irán en la lista de los países que lo apoyan. Fuentes diplomáticas señalaron ayer que este viaje de Aznar nunca se hubiera realizado si persistiera la más mínima sospecha de que Irán apoye todavía, como hizo en el pasado, a ETA.

La única conexión actual iraní en ese terreno sería su apoyo al movimiento integrista Hezbolá, que combate desde el Líbano contra Israel, un país al que los dirigentes iraníes niegan cualquier reconocimiento hasta el punto de que jamás lo nombran. Lo denominan "la entidad sionista". Hezbolá mantiene secuestrados desde hace más de tres semanas a tres soldados israelíes y España ha mediado por su liberación, incluso a través de un contacto directo con Hassan Nasralá, el líder de los integristas. Aznar se negó a comentar el rumor de que podría llevar a Teherán un mensaje en este sentido de EE UU.