Enseñanza reconoce que hubo "desinformación" en el inicio del curso escolar

La consejera de Enseñanza de la Generalitat, Carme Laura Gil, admitió ayer implícitamente la responsabilidad de su departamento en el caos que acompañó el inicio del curso escolar en lo que se refiere a la adjudicación de plazas a maestros y profesores tanto funcionarios como interinos. La consejera compareció ayer ante la Comisión de Política Cultural del Parlament para analizar el inicio del curso escolar y reconoció que hubo "desinformación" sobre los cambios en los criterios de adjudicación de plazas. Enseñanza, explicó Gil, realizó cambios en los criterios de adjudicación de plazas, tanto entre los interinos como entre los funcionarios. Esta reforma, admitió, "causó desconcierto" entre el profesorado. "Creo que ha habido desinformación sobre la nueva manera de colocar al profesorado, que no hemos informado lo suficientemente bien de ello, seguramente por falta de tiempo", dijo. El año próximo, vaticinó, no se repetirá la situación. Gil explicó que los cambios pretendían configurar un sistema "más justo" y ocupó una muy larga intervención en explicar detalladamente todos y cada uno de los criterios de adjudicación de plazas.

No hubo negociación

Las explicaciones de la consejera, sin embargo, no convencieron a la oposición y mucho menos a los sindicatos. Luz Jabardo, portavoz de Enseñanza de CC OO, considera que la cuestión no es explicar a los profesores y sus representantes, que son los sindicatos, sus decisiones, sino negociar previamente con los agentes sociales, los cambios que Enseñanza pretenda introducir, cosa que no se hizo en este comienzo de curso. El sindicato sostiene que había un protocolo de negociación firmado en junio que "ni llegó a comenzar a negociarse", al igual que un acuerdo firmado sobre Formación Profesional que se ha incumplido totalmente. USTEC-STE, CC OO y UGT presentarán el próximo martes ante la fiscalía una denuncia contra la directora de Recursos Humanos del departamento, Mercè Terradellas, por las "irregularidades" que a juicio de los sindicatos se han producido en el proceso de adjudicación de destinos y que, consideran, han lesionado los derechos de los profesores interinos. "En este país", asegura Jabardo, "es una tradición asentada que las cuestiones colectivas se traten con los agentes sociales y no se pueden permitir decisiones unilaterales y totalitarias".

La oposición acusó a la consejera de haber creado "caos y desbarajuste" en el proceso de adjudicación de plazas, especialmente entre el profesorado interino de secundaria, y recordó los inconcebibles retrasos, los errores informáticos y las muchas irregularidades que se sucedieron al comienzo del curso. La diputada socialista Montserrat Duch preguntó, entre otras cosas, sobre la permanencia de barracones en los institutos de secundaria, a lo que Gil respondió refiriéndose al "plan de choque" diseñado el curso pasado, aunque no tuvo respuesta a la precisión de que el presupuesto no establece ninguna partida en este sentido. El diputado de ERC Josep Bargalló denunció que existen varias profesoras interinas embarazadas a las que no se les ha permitido acceder a ninguna plaza y se les ha obligado a hacer sólo sustituciones provisionales hasta que den a luz. Gil prometió investigar si se ha dado algún caso en este sentido.