¿Crisis de medallero? GUILLEM MARTÍNEZ

- Gira, il mondo gira. Me voy al VIII Festival Internacional de Cine Erótico de Barcelona, uno de los pocos festivales de lo que sea barceloneses que aún no ha inaugurado una infanta. El recinto está lleno, fundamentalmente, de caballeros. En las dos versiones de la soledad del caballero: absolutamente solo y absolutamente rodeado y haciendo ruido, en plan oé-oé-oé-nos-ha-tocado-Melilla.La soledad, en fin, tiene tantas variantes como la riqueza. Por ejemplo, hay ricos que incluso no tienen nada. Bueno. L'Hospitalet. La Farga. Casetas de la cosa. La cosa: vídeos en cuyas portadas hay tantas personas que parecen vídeos de la Gene sobre el món casteller, consoladores que reproducen tan bien el modelo original que sólo les falta decir mamá, muñecas inflables tan perfectas que hasta tienen jaqueca, ropa extrañísima de la prestigiosa firma Señorita-cómo-ha-conseguido-meterse-ahí-porfa. En una urna de cristal hay una señorita que se mete cosas por diversas aberturas. Le cabe todo. Igual es la caseta de Sansonite. De vez en cuando cruza el recinto alguna señorita vestida para matar, que se deja fotografiar en plan compadreo. Como Maradona. Otra similitud de este colectivo de señoritas con Maradona es que, glups, también exhiben un notorio dominio de los esféricos. Señoritas-Maradona, descripción plis-plas system: a) las mires por donde las mires, siempre están, guau, de canto; b) para describirlas con las manos haría falta aprovechar una reunión de escalera, y así arrejuntar 67 manos, c) hay serias posibilidades de que no sepan hacer los canalons que me hace mi tieta. Podría extenderme más, pero el objeto científico de este trabajo de campo es otro. Se trata de asistir in situ al intento de establecimiento del récord mundial de acoplamientos, a cargo de, ya lo habrán adivinado, Rosanna Doll. No se vayan amigos.

- Contamos contigo. El anterior récord femenino de levantamiento de caballeros, me explica un científico, estaba en quinientos y pico. No me consigue especificar el pico, de manera que se deduce que los últimos acoplamientos fueron tan poco lucidos que nadie los recuerda. Ahora, en el incomparable marco del recinto de la Farga, y en la caseta de Papillon-Films, Rosanna Doll intentará hacer trizas esa marca hasta elevarla a las 1.000 unidades. Empezó ayer (viernes) a las 15.00 horas. Seguirá hasta hoy a las 22.00 horas. Pueden ir con su familia. En todo caso, ¿quién es Rosanna Doll?

- ¿Quién es ella? Leo en un folleto que Rosanna Doll nació, como indica su nombre, en Bari, La Cutrania, Italia. En el folleto se me asegura que "se hizo famosa por su cara de niña mala y por el especial carácter de su manager, que era y sigue siendo su madre". Como la Pantoja. Ha protagonizado diversos filmes. Todos recordamos entrañablemente Mata-Hari, Penetraciones eficaces, Increíblemente puta o el más conceptual Rosanna y la banana africana -sinopsis: "Rosanna vuelve a la primera línea del sexo duro para demostrar a sus innumerables admiradores qué es capaz de hacer con una buena verga, sin desdeñar la muy apetitosa banana africana"-. Bueno. Me pongo cerca del escenario para ver el inicio de la competición. Como todo buen aficionado, soy consciente de que los primeros minutos de estos encuentros siempre son los más apasionantes.

- Yo estuve allí. La escenografía es sencilla. Un escenario, un colchón meditado, cuatro sillas, la italiana y una brasileña. Ignoro para qué sirven las sillas y la brasileña. La brasileña resulta ser la speaker de la cosa. Anima al cotarro. De hecho, para realizar el experimento necesita animar a 1.000 usuarios del experimento. Rápidamente aparecen de entre el público. Firman una solicitud. Con su DNI.

Para validar el récord -nota: si esta semana un miembro de COI se presenta en su casa para examinar el DNI de su marido, sea tolerante; lo ha hecho para aumentar el enclenque medallero español-.

Los voluntarios aparecen en el escenario con un gorro y una camiseta conmemorativa del evento deportivo, máscara -quien así lo desee- y calzoncillos de la marca si-lo-sé-me-los-hubiera-puesto-limpios. Se sientan en las sillas. Entonces aparecen varias señoritas-Maradona, que se ponen a cuatro patas delante de los caballeros y les animan a endurecer sus propósitos iniciales. Los caballeros ven así realizado un sueño. Más concretamente, ese sueño terrible de que estás en pelotas en medio de una sala.

De hecho, muy pocos consiguen endurecer los propósitos, etcétera. Aun así, Rosanna Doll, una gran profesional, les da una oportunidad de pasar a la historia de la agronomía. No para. En 40 minutos, realiza 50 transformaciones. A la hora de partido, Rosanna Doll y sus asesoras orales se van a boxes, a cambiar el aceite. Tienen hasta las 22 horas de hoy para verlo.