El Gobierno regional dejó sin invertir 47.883 millones de los Presupuestos de 1999

El Gobierno regional, del PP, cerró el ejercicio presupuestario de 1999 según su costumbre. Gastó 6.606 millones menos de lo que ingresó, con lo que logró superávit por tercer año consecutivo. Para conseguir ese resultado, del que presumió ayer el viceconsejero de Hacienda, Juan Bravo, el Ejecutivo regional, entre otras cosas, dejó sin invertir 47.883 millones de pesetas en obras nuevas para la región. El Gobierno de Alberto Ruiz-Gallardón presupuesta cada año para inversiones unos 50.000 millones de pesetas más de lo que realmente acaba gastando al final del ejercicio.

Alta ejecución

La liquidación del presupuesto regional de 1999 se conoció oficialmente ayer. El Gobierno regional ingresó un 8% menos de lo previsto. Cuando aprobó los presupuestos pensó recaudar por distintas vías 869.886 millones de pesetas, pero al finalizar el año sólo encontró en la caja regional 800.086 millones de pesetas. La recaudación de impuestos funcionó según lo previsto. Incluso un poco mejor: el impuesto de transmisiones patrimoniales y el de actos jurídicos documentados dejó casi 10.000 millones de pesetas más de los previstos. Con respecto a los ingresos, el Gobierno destacó el resultado de la ejecución de los tributos cedidos por el Estado a la Comunidad. Se han reconocido derechos en el impuesto de transmisiones patrimoniales por importe de 129.742 millones, un 103% más de lo previsto; en el impuesto de actos jurídicos documentados, por importe de 55.279 millones (111%); y en el de sucesiones y donaciones, por 52.681 millones (115%).

Otras transferencias corrientes de capital a las arcas regionales funcionaron mucho peor y acabaron perjudicando la ejecución presupuestaria. El agujero en los ingresos (69.800 millones menos de lo previsto) lo resolvió el Ejecutivo autónomo recortando gastos en un 9%, con lo que consiguió superávit.

El Gobierno de Alberto Ruiz-Gallardón gastó 76.000 millones menos de lo que había previsto, y de ese monto, la mayoría (más de 48.000 millones) correspondía al capítulo de inversiones. De cada 100 pesetas que el Ejecutivo regional pensó dedicar a obras nuevas en la región, 20 pesetas no pudieron ser empleadas. El Ejecutivo autónomo ejecutó casi al 100% el dinero reservado para pagar al personal de la Comunidad o para ir abonando los intereses y la amortización de capital de la deuda contraída por la Administración regional.

Juan Bravo, viceconsejero de Hacienda, destacó el alto porcentaje de ejecución presupuestaria en inversiones (el 80%), "en cifras absolutas, la cifra más alta alcanzada" en la Comunidad. Recordó que, en 1995 (último año de gestión de los socialistas), la liquidación arrojó un déficit de 25.000 millones, mientras que durante la gestión popular el balance a final de año era de superávit.Bravo se felicitó porque la Hacienda autonómica "tiene las cuentas saneadas y equilibradas". Avanzó que este año se cerrará con superávit, ya que "la recaudación se incrementa entre un 10% y 15% mes a mes".