Los vecinos de La Punta denuncian a la policía por la carga del domingo

Versiones contradictorias

La Asociación de Vecinos de La Punta, La Unificadora, ha presentado denuncia ante el Juzgado de Instrucción número 17 de Valencia contra la policía por insultos y agresiones en la carga policial ocurrida el pasado domingo. Carmen González, presidenta de la asociación, aseguró ayer que "lo ocurrido frente a la Casa de Tararena no tiene nombre, la Policía se presentó allí, los agentes no se quisieron identificar, no atendieron a explicaciones, emplearon la porra contra dos personas sin ningún tipo de argumento". En las diligencias policiales, figura que tras una llamada que denunciaba la ocupación de una alquería en el Camino del Canal, la Policía se presentó en el lugar y se encontró con un grupo de más de 30 personas que se negaron a identificarse y que presentaron actitud hostil armados con piquetas de albañil y estacas. Uno de los ocupantes de la casa intentó quitar el intercomunicador a un agente, y éste, en un forcejeo, golpeó a una chica. Al lugar llegaron otras unidades de Policía Nacional y de la Policía Autonómica. El resultado fue de dos detenidos, una chica que además fue atendida en el hospital por herida en la cabeza, y un chico. Sobre ambos pesan cargos de resistencia a la autoridad.

Esta versión no coincide con la de los vecinos. Según Carmen González, que presenció parte de los hechos, los agentes se presentaron "con actitud agresiva". González afirma que un grupo de 40 personas entró en la alquería, conocida como Casa de la Tararena. La finca, cuyos propietarios son, según González, la congregación de los Padres Escolapios, está deshabitada y sirve de refugio para drogadictos. Dentro de las actuaciones que se ha marcado la asociación para salvar la huerta del proyecto de la Zona de Actividades Logísticas (ZAL) está la rehabilitación de varias casas; la de Tararena es la segunda sobre la que actúan. "Empezamos a trabajar a las 8.00 de la mañana. Como teníamos que sacar escombros y limpiar porquería, llevábamos palos, picos y demás herramientas. Nos habíamos planificado un domingo de tareas en una casa sobre la que nunca actúa la policía aunque se lo hayamos pedido. Hacemos lo que no es capaz de hacer la Administración. No podemos quedarnos mirando mientras las alquerías deshabitadas se convierten en vertederos", afirma. González asegura que la asociación de la que es presidenta ha denunciado casos como el de una furgoneta abandonada con orificios de bala en los cristales desde julio y la utilización del jardín de la Iglesia del Camí La Punta como lugar de reunión para toxicómanos que dejan las jeringuillas frente a la verja de un colegio sin que haya actuado la Policía. González ha solicitado entrevistas con la delegada del Gobierno, Carmen Mas, y el jefe superior de Policía, Segundo Martínez, sin obtener respuesta.