Pujol prepara el debate de política general sin buscar la ruptura con el PP

Convergència tiene a Esquerra Republicana en el corazón, pero no pasa por su cabeza romper con el Partido Popular. Al menos de forma inminente. No se esperan, pues, cambios de orientación espectaculares en la política del Gobierno de CiU, que espera aprobar sus presupuestos con el apoyo del PP. El presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, reunió ayer a los consejeros de su Ejecutivo para orientar el debate de política general que se celebrará en el Parlament la próxima semana.

La ejecutiva de Convergència se pronunció de forma mayoritaria el pasado martes en favor de que la política de coalición en Cataluña se oriente a buscar pactos con Esquerra Republicana. Pero desde algunos sectores de CDC y desde sus propios aliados de Unió no hay prisas. Ni demasiado entusiasmo por ese acercamiento a Esquerra.Y parece que la prudencia marcará el discurso de Pujol. Fuentes del Gobierno catalán no prevén -la última palabra siempre la tiene el presiente de la Generalitat- que el debate de política general, que se celebrará el martes, miércoles y jueves de la próxima semana, suponga un giro espectacular en la política de alianzas de Convergència i Unió.

No se decarta que Pujol critique con dureza al PP. Ya lo hizo la pasada semana en la conferencia que pronunció con motivo del 25º aniversario de CDC en la Pedrera. Pero ni los populares ni los convergentes irán más allá de los gestos. Para el PP no es deseable generar inestabilidad en Cataluña que pueda desembocar en unas elecciones anticipadas. Pero al tiempo, los populares ven que un acercamiento de CiU a ERC le abriría espacio entre el electorado moderado de la coalición nacionalista.

Por parte de CiU, el apoyo a los presupuestos generales del Estado o la actitud dialogante respecto a la reforma de la ley de Extranjería son elementos que muestran esa voluntad de no ruptura. El portavoz parlamentario de CiU, Xavier Trias, mostró ayer su acuerdo con las líneas generales del proyecto de Presupuestos Generales del Estado para 2001. Trias destacó positivamente el crecimiento de las inversiones en todo el Estado y en concreto para Cataluña.

Con todo, CiU no tiene motivos para saltar de alegría por el trato que recibe del Gobierno popular. Desde las filas de Pujol se ha criticado duramente la actitud adoptada por el Ejecutivo de José María Aznar en asuntos como la no presencia del distintivo autonómico en las placas de las matrículas o, como ayer dijo Trias, el hecho "lamentable" de que el PP hubiera rechazado esta semana la propuesta nacionalista para que las comunidades formaran parte de las delegaciones españolas en los consejos de ministros la UE.