Fin de un ciclo
Intentaré hoy hacer una reflexión de lo que el equipo español de balonmano se encontrará en el camino de los Juegos Olímpicos, sólo una opinión hasta los cuartos de final, donde ya sabremos quién será nuestro rival.Hasta entonces, el camino no va a ser fácil, diría que las dificultades que nos esperan, aunque menos que en el otro grupo (el A), harán que España tenga que jugar a un nivel muy alto.
Éste es un torneo donde el equipo nacional lo enfoca con renovadas ilusiones, fe en sus posibilidades, con la fuerza y confianza que te da conocer el pódio y con la garantía de haber hecho las cosas bien, al fin, una preparación adecuada: dos meses juntos, teniendo tiempo para trabajar progresivamente, para cuidar todos los detalles con importantes partidos, algunos incluso con rivales directos -Suecia- o contra futuros adversarios en cuartos de final -Yugoslavia, Cuba o Egipto-.
Se da además la circunstancia de culminar un ciclo de cuatro años con éxitos, los más importantes de la historia del balonmano español.
Se llega, pues, con un grupo de jugadores expertos, preparados para grandes retos, con todo a su favor para estar en lo más alto. Sólo le falta por conocer el color del oro, ya conocen la plata y el bronce.
El Grupo B, donde está España -en teoría más fácil que el A- compuesto por Túnez, Australia, Francia, Eslovenia y Suecia, por orden de encuentros-, se puede pensar que la clasificación para la siguiente ronda está asegurada (tienen que clasificarte entre los cuatro primeros del grupo). El liderazgo del grupo se decidirá ante Francia y Suecia, los demás partidos se ganarán, no sin dificultades.
En el Grupo A, cuando se llegue a jugar los cuartos, el enfrentamiento que corresponda será ante un equipo que seguro estará más desgastado que el español, puesto que éste es mucho más parejo y todos los partidos serán más igualados. Tanto Rusia, Yugoslavia, Alemana, Egipto, Corea y Cuba tienen su opciones de pasar a la siguiente ronda.
Para terminar, sólo tengo una sombra de duda: ¿sabremos superar los momentos críticos que deciden los grandes encuentros y que nos han impedido más de una vez estar en el puesto más alto?
Cecilio Alonso, ex jugador internacional de balonmano.
