Rusia prohíbe cortar la electricidad a las centrales de misiles nucleares

Anatoli Chubáis, el ex vicejefe de Gobierno que ahora dirige el monopolio de la electricidad de Rusia, firmó ayer una orden que prohíbe el corte de energía eléctrica por falta de pago a las unidades de misiles estratégicos, clave de la defensa nuclear del país más grande del planeta. Esa disposición debería evitar incidentes como el suscitado el lunes en una base de la región de Ivánovo (al noreste de Moscú), cuando los militares afectados ocuparon la central eléctrica, tomaron como rehenes a varios de sus empleados y reanudaron por su cuenta el suministro de electricidad. El anuncio, efectuado por Andréi Trapeznikov, miembro del Consejo de Directores de Sistemas de Energía Unificados (de mayoría estatal), abunda en lo que aseguró el martes otro directivo de la compañía. Serguéi Pinchuk defendió entonces el derecho a cortar la electricidad a quien no pague la factura, pero añadió que "a nadie se le ocurrirá hacerlo con las instalaciones estratégicas".En los últimos días, y después de un mes de agosto catastrófico (marcado por el hundimiendo del submarino Kursk y el incendio de la torre de televisión de Moscú), se han multiplicado los problemas suscitados por cortes de electricidad que han afectado a instalaciones vitales. El más peligroso de todos ellos se produjo en los Urales el pasado fin de semana, cuando la avería en una línea de alta tensión dejó sin suministro a una central nuclear y a la mayor planta de procesamiento de combustible atómico, que funciona con dos reactores. La alarma se disparó aún más con los casos de la base de Ivánovo y del polígono de lanzamiento de cohetes y satélites de uso militar de Plesetks, en el límite norte del país.

Ayer, el Ministerio de Finanzas asignó al de Defensa 1.300 millones de rublos (unos 9.000 millones de pesetas) para que liquide deudas con las compañías eléctricas.