Mayor y Anasagasti ponen fin a dos años de desencuentro, pero sin acercar posiciones

El primer encuentro entre Gobierno y PNV tras dos años de alejamiento a causa de la integración de los nacionalistas vascos en el Pacto de Lizarra, en septiembre de 1998, sirvió para que ambas partes constataran sus diferencias irreconciliables. Durante la cita con el ministro del Interior, Jaime Mayor, la delegación peneuvista, encabezada por Iñaki Anasagasti, sostuvo que la violencia en Euskadi tiene un componente político y se opuso al aislamiento de EH. No obstante, Anasagasti apoyó la lucha antiterrorista y condenó a ETA porque "no tiene otra ideología que la de la muerte". Además, pidió a Mayor que el PP vasco participe en la ronda de partidos del lehendakari. "Sin el PP no se puede hacer nada, y sin el PNV, tampoco", dijo.

El titular de Interior y el portavoz del PNV en el Congreso se han cruzado durísimas invectivas en estos dos años de confrontación y la tensión estuvo muy presente al principio de la cita. Sin embargo, el propio Anasagasti -al que acompañaban el portavoz del PNV en el Senado, Joseba Zubia, y el portavoz nacionalista en Interior, Joxe Joan González de Txabarri- señaló al término de la reunión que los ánimos se relajaron un tanto a medida que ésta transcurría.Mayor informó a la delegación nacionalista de la situación de la lucha antiterrorista, al igual que ha hecho con los demás grupos parlamentarios. Pero, posteriormente, la delegación vasca abrió una discusión política en la que se evidenciaron las diferencias que separan a Gobierno y PNV.

Tanto Anasagasti como Mayor expusieron sus posiciones sin tapujos. El portavoz del PNV en el Congreso defendió que existe un componente político en el problema de la violencia en Euskadi, lo que hace imposible que el conflicto pueda resolverse exclusivamente por la vía policial. Como conclusión, Anasagasti expresó su oposición a la política de aislamiento de EH.

El ministro del Interior replicó que la vía para acabar con el terrorismo es la policial, con el respaldo de la movilización social. Y reprochó a Anasagasti que el PNV rompiera el Pacto de Ajuria Enea justamente cuando HB y ETA estaban contra las cuerdas a causa de las manifestaciones masivas del verano de 1997, tras el asesinato del edil del PP de Ermua Miguel Ángel Blanco.

Esta diferencia de fondo en el diagnóstico impidió a ambas partes ir más allá en el debate, por lo que no se llegó a tratar la actitud del PNV ante el Pacto de Lizarra. Anasagasti, sin embargo, aludió al acuerdo entre nacionalistas en la rueda de prensa posterior a la cita: "Lizarra está muerto. ¿Qué más quieren?. ¿Una esquela?". Y recordó que el propio Xabier Arzalluz dijo que "ETA ha puesto una bomba lapa a Estella".

Tampoco hablaron de los principios que pactaron el Gobierno y el PSOE, el pasado jueves, para recuperar la unidad democrática contra ETA. Al referirse a ellos a preguntas de los periodistas, Anasagasti sólo puso reparos al punto referente al respeto a la Constitución y el Estatuto, y recordó que el PNV no había votado la Constitución y que Alianza Popular (AP), antecedente del PP, se había opuesto al Estatuto.

En todo caso, apuntó que esos puntos pactados entre los socialistas y el Gobierno son insuficientes en la actual situación, y señaló que la clave está en la ronda que abrió ayer el lehendakari Ibarretxe con los partidos vascos.

Iniciativa de Ibarretxe

Anasagasti dijo que, a lo largo del encuentro, había pedido hasta cuatro veces a Mayor que el PP vasco acudiera a la convocatoria de Ibarretxe. Mayor le respondió que esa decisión no le competía a él sino a la dirección de los populares en Euskadi. Sin embargo, fuentes del PP vasco reiteraron ayer que no tienen intención de reunirse con Ibarretxe hasta que el PNV abandone el Pacto de Lizarra y rompa con EH.Tanto Mayor como Anasagasti se cruzaron numerosos reproches históricos. Así, el portavoz del PNV en el Congreso recordó cómo en la etapa de Gobierno socialista hubo un contacto permanente entre socialistas y nacionalistas, y sus ejecutivos respectivos, para abordar la lucha antiterrorista y cómo, tras la llegada del PP al Gobierno, José María Aznar cambió esa costumbre.

Anasagasti también reprochó a Mayor que el Gobierno, en su discurso, vincule al nacionalismo democrático con la violencia. En este sentido, aprovechó su comparecencia pública para realizar una rotunda condena del terrorismo y de los principios ideológicos de ETA, que "no tiene otra ideología que la de la muerte". También quiso dejar claro que el PNV apoya la lucha antiterrorista. "El PNV, bajo ningún concepto, está en desacuerdo con la lucha contra la violencia", manifestó Anasagasti.

El portavoz del PNV en el Congreso, tras realizar un balance positivo de la reunión - "nos hemos mirado a la cara y nos hemos dicho las cosas"- dejó abierta la puerta a futuras reuniones, tanto con el Gobierno como con otros partidos, en el País Vasco o en Madrid. "Hace falta mucha cocina, antes de que el plato sea servido a la mesa. Hay que madurar las cosas y luego proceder".