Los geos interceptan en alta mar un barco con 10.000 kilos de cocaína que se dirigía a Europa

Una veintena de detenidos y miles de kilogramos de cocaína -entre 7 y 10 toneladas según las primeras estimaciones- son los resultados de una gran operación antidroga llevada a cabo anoche en alta mar por el Grupo Especial de Operaciones (GEO) de la policía. Los agentes asaltaron un barco procedente de Venezuela en una operación dirigida por el juez Baltasar Garzón, en la que han colaborado policías de varios países. De confirmarse las cifras, se trataría de uno de los mayores alijos de droga decomisados en Europa.

Redada internacional

Las fuerzas de seguridad esperaban que el barco, con los detenidos y la carga a bordo, llegaran a Canarias a lo largo del día de hoy. Si se confirma la cifra de alrededor de 10 toneladas de carga, el alijo aprehendido ayer podría igualar la cantidad de droga intervenida en el barco Tammsaare durante la Operación Temple, aunque la droga total intervenida en esta redada fue mayor debido a las cantidades aprehendidas en tierra. En cualquier caso se trataría de uno de los mayores alijos de cocaína interceptados en alta mar tanto por la Policía española como por los cuerpos policiales de toda Europa, según fuentes de la investigación, que destacaron que la Operación Ostra ha sido uno de los mayores golpes registrados contra el narcotráfico.

La incautación se produjo en un buque con bandera de Santo Tomé que provenía de Venezuela y que fue abordado en alta mar por los agentes de los GEO, quienes detuvieron a toda la tripulación, en total veinte hombres de diversas nacionalidades. La droga iba oculta en unos contenedores del barco, que supuestamente transportaba otro material. El barco llegará hoy a Canarias, donde será sometido a un exhaustivo registro que puede durar varios días, dada la complejidad de la carga y dado que se trata de una nave de grandes dimensiones (120 metros de eslora). Hasta que no acabe esta minuciosa inspección, no se sabrá la cantidad definitiva de cocaína.

La operación fue coordinada por el Plan Nacional sobre Drogas y en ella participaron agentes del Cuerpo Nacional de Policía con el apoyo técnico del Ministerio de Defensa y Vigilancia Aduanera. El juez central de instrucción número 5 de la Audiencia Nacional, Baltasar Garzón, fue el encargado de dirigir toda la operación.

En la redada han participado varios países, entre ellos Italia, y es la continuación de otra operación, de mayor alcance, realizada el pasado día 27. Entonces, fuerzas policiales de siete países colaboraron en la llamada Operación Orinoco 2000, en la que se incautaron de casi 10 toneladas de cocaína y fueron detenidos 15 miembros de un cartel colombiano. Según fuentes policiales, la carga del barco interceptado anoche formaría parte de otro envío de la misma organización.La operación de ayer es una acción más contra una gran red de tráfico internacional, que la agencia estadounidense antidroga (DEA) bautizó como Travesía, y que se calcula que pudo transportar unas 68 toneladas de cocaína a 12 países en los últimos tres años. Los traficantes transportaban cocaína colombiana por tierra y aire hasta unas instalaciones en la jungla de Venezuela, en el Delta del Orinoco, donde era preparada para ser llevada en barco al extranjero. Parte de esa cocaína tenía como destino final los Estados Unidos, pero la mayoría de los cargamentos se dirigía a Europa. En aquella operación participaron efectivos policiales de una docena de países.

El delegado del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas, Gonzalo Robles, ofrecerá hoy una rueda de prensa en la que dará detalles de la operación policial y en la que le acompañarán los responsables policiales que han dirigido el dispositivo.

Fuentes cercanas a la investigación expresaron ayer a EL PAÍS su malestar por la convocatoria de esta rueda de prensa, ya que fue anterior a la operación y, a la postre, lo que provocó que trascendiera a los medios de comunicación antes de que se sepa cuál es su alcance real, es decir, la cantidad definitiva de droga decomisada.