Convergència critica la "dureza" del presidente y pide más diálogo

El portavoz de Convergència Democrática de Catalunya, Xavier Trias, trató ayer, tras su reunión con el ministro del Interior, Jaime Mayor, de dar una sensación de unidad y de resaltar el "apoyo leal" que su partido ofrece al Gobierno en la lucha antiterrorista. Sin embargo, Trias no pudo ocultar su malestar por la "dureza" del discurso del presidente del Gobierno, José María Aznar, contra el PNV. "No nos gusta esa tendencia que tiene a generalizar conceptos" al hablar del País Vasco, dijo el nacionalista catalán.

La postura de Convergència, -su socio, Unió Democrática, visitará a Mayor el lunes- obligó a Trias a hacer complicados equilibrios verbales. Los nacionalistas catalanes apuestan por el diálogo, especialmente con el PNV, pero también quieren destacar su "apoyo leal" al Ejecutivo en la lucha antiterrorista. Y las palabras de Aznar complicaron mucho esta delicada tarea de CiU de nadar entre dos aguas. Sobre todo porque la ronda de encuentros que ha organizado Mayor con todos los partidos era una iniciativa que promovieron los socialistas, pero por la que CiU apostó fuerte desde un principio.Por eso ayer, haciendo un esfuerzo por utilizar buenas palabras, Trias quiso mostrarse "optimista" respecto a las posibilidades de que esta ronda de diálogo pueda fructificar. Pero tampoco dejó de criticar la actitud del Gobierno: "Yo creo que no buscar una vía de diálogo con el PNV es un error".

También pareció referirse a la estrategia del Ejecutivo -aunque asimismo al PNV- cuando dijo que la situación de crispación a la que se ha llegado tiene muy difícil solución, pero que en todo caso la vía de salida no pasa por "salir constantemente a la prensa para fijar la postura de cada uno".

Más lejos fue Artur Mas, portavoz del Gobierno de la Generalitat, quien pidió a todos los partidos que hagan un esfuerzo de diálogo "con generosidad" y que no se pretenda "poner a nadie contra las cuerdas, ni de rodillas", en clara alusión a las críticas de Aznar a la actitud y estrategia de la dirección del PNV.

Trias comentó también los puntos de acuerdo a los que habían llegado el PSOE y el PP. Convergència acepta estas "reglas del juego democráticas", siempre que no sean una condición, sino un principio para dialogar. En cualquier caso, y de acuerdo con la tradicional postura de CiU, Trias dijo que no hay que "sacralizar" la Constitución. Convergència se encuentra "cómoda" en el marco constitucional y estatutario, pero también recuerda que ambas normas llevan consigo la forma de cambiarlas, por lo que no hay que dramatizar este debate.

Además del apoyo al Ejecutivo, Trias ofreció la colaboración en la lucha antiterrorista de los Mossos d' Esquadra "incluso por encima de sus competencias". Convergència sigue apostando por ésta y otras rondas de diálogo, pero con la "discreción" y la calma necesarias para llegar a buen puerto. "A veces no funciona a la primera, pero hay que seguir intentándolo", fue su conclusión.