Los grandes equipos europeos vaticinan el caos y el desastre
Los principales clubes europeos no comulgan con el nuevo sistema de traspasos de jugadores impuesto por la Unión Europea que el jueves aceptaron la FIFA y la UEFA. Los clubes más potentes del continente, secundados por prestigiosos entrenadores y ex jugadores, criticaron ayer con dureza los puntos claves del proyecto, especialmente el que concede a los jugadores mayores de 24 años total libertad para cambiar de club cuando deseen.Con gran dramatismo, los clubes vaticinan que el plan de la UE tendrá consecuencias desastrosas. "Es una medida muy, muy seria. Una de las medidas que más repercusiones tendrán para el fútbol. Todos pensamos que, por el bien de este deporte, lo mejor sería que las cosas siguiesen como hasta ahora", aseguró ayer Peter Kenyon, director ejecutivo del Manchester Unided. Desde el mismo club, el mítico ex jugador y capitán de Inglaterra, Bobby Charlton, añadió: "Que la gente tenga libertad para irse de un club cuando quiera hará mucho daño al fútbol, que se va a volver muy agitado. Me parece que son los políticos los que están haciendo las normas, y no la gente del fútbol. Espero que cuando escuchen cuidadosamente lo que puede ocurrir, cambien los planes que tienen".
El técnico francés del Arsenal, Arsène Wenger, fue más allá. "Sería desastroso que los pagos por traspasos se ilegalizaran. Resultaría preocupante que un jugador que ayer costó millones no costase nada mañana". Wenger tiene motivos para estar alarmado. Hace una semana, el Arsenal pagó 3.500 millones al Girondins por Wiltord.
Riesgos económicos
Desde Alemania, otro ex jugador, Karl Heinz Rummenigge, vicepresidente del Bayern de Múnich, se unió al coro de críticas que el jueves inició su presidente, el también ex internacional Frank Beckenbauer. "El dinero en torno al fútbol va a seguir siendo el mismo, pero en vez de llegar a los clubes se irá directamente a los jugadores", se quejó Beckenbauer. "Son los clubes los que corren todos los riesgos económicos. Ellos son los responsables de los contratos que firman, no el señor Bla-tter. Es inaceptable cualquier cambio sin consultar a los clubes", critica Rummenigge apuntando al presidente de la FIFA.En Francia, las mayores críticas han llegado de boca del anterior seleccionador nacional, Aime Jacquet, para quien las medidas impulsadas por la UE atacan la cantera. "Si Europa se niega a admitir las especificidades del deporte, quizá no haya nadie que quiera trabajar con los jóvenes nunca más. Los clubes que gastán mucho en la cantera dejarán de hacerlo", vaticina Jacquet, alma mater de la nueva generación de jugadores que llevó a Francia a ganar el Mundial 98, con él como entrenador, y la Eurocopa 2000.
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