La sequía pone en jaque los embalses valencianos

La falta de lluvias en la Comunidad provoca una situación crítica en los pantanos valencianos. La sequía es la característica del actual año hidrológico y, al margen de favorecer los incendios forestales, ha provocado que el agua disponible en los embalses de la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ), principal fuente de suministro para el campo valenciano, hayan registrado esta semana un nuevo descenso de 20,77 hectómetros cúbicos. Esta disminución sitúa en un 13,33% la cantidad de agua embalsada, lo que en cifras significa que los embalses valencianos disponen de 442,76 hectómetros cúbicos de una capacidad total de 3.322,7. La disponibilidad de agua en los 26 pantanos valencianos ha bajado tres puntos desde la primera semana de agosto, cuando las reservas estaban al 16,27%.La escasez de lluvias hace que la CHJ considere este año como uno de los más duros de la última década. Responsables de la confederación calificaron ayer la situación como "la peor sequía desde 1994" y estimaron que durante este año sólo ha llovido un 30% de la media en un año normal. De hecho, las precipitaciones recogidas en la madrugada del lunes en los pluviómetros de la CHJ fueron prácticamente testimoniales y en ningún caso superaron los 7,2 litros por metro cuadrado recogidos en Quart de Poblet (Horta Nord). La escasez de reservas hídricas es especialmente crítica en el pantano de Maria Cristina, que se encuentra cerrado y que está únicamente al 1,18% de su capacidad. A la escasez de agua, hay que añadir la gran concentración de algas en el embalse.

Los embalses de Amadorio y Contreras también se encuentran cerrados. Mientras que el pantano de Forata, con una disponibilidad del 2,83% está soltando únicamente un caudal ecológico. El embalse del Regajo, según las mismas fuentes, se encuentra cerrado para asegurar el riego de los cultivos de Segorbe durante septiembre. El resto de pantanos, en mejor situación, suministra agua con una política de restricción.

Ante esta situación la Unió de Llauradors i Ramaders de Castellón pedirá hoy a la Diputación Provincial la constitución de una mesa de seguimiento de la sequía. La propuesta, que fue apoyada por el Bloc Nacionalista Valencià, pretende sentar a negociar a "todos los sectores que tengan algo que decir" para "elaborar un discurso unitario" y avanzar en la búsqueda de soluciones. La Unió recordó la grave situación que vive la provincia de Castellón, donde a la escasez de agua embalsada hay que añadir que algunos acuíferos "están bajo mínimos".