"Han actuado con mala leche al buscar un punto estratégico para pegar fuego a la Granadella"

En 24 horas el paisaje mudó radicalmente de color. El verde reinante durante más de 60 años en el paraje de la Granadella de Xàbia se tornó gris por efecto del fuego. Los propietarios y vecinos de la zona volvían ayer resignados a su casas: "Tarde o temprano, sabíamos que acabarían quemándola. Los pirómanos han actuado con mala leche y han buscado un punto estratégico para prenderle fuego al monte", se lamentaba un vecino.El balance provisional del incendio que la noche del sábado se declaró en la Granadella de Xàbia es estremecedor. Han ardido, según fuentes del Ayuntamiento de la localidad, 500 hectáreas (400, según los datos provisionales de Medio Ambiente) de gran valor paisajístico y ecológico, calificadas, la mayor parte de ellas, como suelo no urbanizable de especial protección. Además, unas 400 personas se vieron obligadas a desalojar sus viviendas.

La operación de evacuación se inició a las dos de las madrugada del sábado, cuando las llamas, que habían comenzado en la escarpada zona del Barranc de la Xapa, avanzaron hacia las urbanizaciones de Costa Nova y Panorama.

Unas 200 personas, que abandonaron apresuradamente sus viviendas y sólo llevaron consigo algunas maletas, pasaron la noche en el polideportivo de Xàbia, donde reinaba el nerviosismo. Los desalojados preguntaban constantemente a las fuerzas de seguridad y responsables políticos sobre la evolución del incendio y si las llamas habían alcanzado las casas.

Hasta últimas horas de la tarde de ayer no pudieron regresar a sus domicilios. El panorama que encontraron fue desolador. El ambiente que reinaba era tanto de resignación como de ira hacia los supuestos autores del incendio que, según los vecinos, fue claramente intencionado.

Uno de los desalojados recordaba que a lo largo del verano se habían producido conatos de fuego, en todos los casos sofocados por la prontitud con que se daba aviso. "Ahora, han actuado con mala leche, y han elegido un sábado por la noche y un lugar estratégico", apuntaba.

La noche también fue dramática para las sesenta personas que se quedaron aisladas en la cala de la Granadella. Los vecinos de los numerosos chalés que rodean esta cala sólo disponen de una salida, una carretera que fue cortada cuando las llamas cruzaron de un lado a otro de la vía. La playa se convirtió entonces en el refugio más seguro. Una de las personas que pasó la noche en la cala lamentó que no se hubiera previsto un plan de evacuación por mar.

Los responsables municipales tampoco dudan sobre el origen "intencionado y premeditado" del fuego. En el mismo sentido se manifestó Vicent Mahiques, portavoz de la plataforma cívica en defensa del territorio y litoral de Xàbia: "Los pirómanos se han salido al final con la suya", comentó.