Educación
En España seguimos pensando que las papeleras están de adorno. Niños, jóvenes, mayores... van dejando sus restos esparcidos por todas partes. Me he sentido tentado de decirle a un desconocido: "Perdón, tírelo a la papelera, que la tiene ahí al lado". Pero, sinceramente, no me he atrevido. Lo mismo me ocurre cuando veo a mocetones sentados tranquilamente en el autobús, mientras una señora, o señor, de más de 80 años hace equilibrios para no caerse. La educación, me temo, brilla por su ausencia. No sé si es que las normas de convivencia ya no están de moda. Los niños, suele decirse, aprenden lo que ven; también lo que se les hace comprender con cariño y paciencia; y si desde pequeños no desarrollan su sensibilidad, su autocontrol y hábitos saludables, tendremos cada vez adolescentes más violentos.-
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