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VERANO2000Consejos médicos

El barro alivia el dolor de la picadura de avispa

- La comida despierta el apetito de los insectos. Por lo tanto hay que evitar exponerla a su olfato. Las avispas y las abejas, en esta situación, son especialmente golosas. Pero esto no quiere decir que todos los insectos que viven en el campo sean enemigos de las personas. La mayoría no lo son. - ¿Qué hacer? Hay que conocer la naturaleza; eso da seguridad. Ante las picaduras, mordeduras o urticarias, lo ideal es estar informado de los pasos a seguir. Ser precavido nunca está de más. De todos modos, a los insectos, lo mejor es no hacerles demasiado caso; a las abejas y avispas hay que ignorarlas, aunque estén pululando alrededor. Empezar una guerra contra ellas carece de sentido, al final siempre pierde quien pretenda alejarlas.

- Los remedios. Cualquier picadura de insecto requiere una limpieza inmediata de la zona afectada y extraer el aguijón. Las compresas de agua con vinagre, o de amoniaco, resultan muy eficaces para rebajar la hinchazón. También las bolsas de hielo son útiles. Una pomada analgésica servirá, asimismo, para calmar el dolor; y algún antihistamínico ayudará a contener la inflamación. Pero si no fuera posible aplicar estos remedios, una consulta a tiempo, a cualquier habitante de la zona, servirá para saber que, un poco de barro (que puede hacerse vertiendo agua en la tierra), aliviará el dolor.

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