Ascó y Vandellòs buscan otras industrias para cuando acabe la vida útil de las nucleares

Los municipios de Ascó (Ribera d'Ebre), con dos centrales atómicas, y Vandellòs (Baix Camp), con una activa y otra en proceso de desmontaje, se preparan para la superación del monocultivo industrial energético mucho antes de que los tres grupos nucleares acaben su vida activa. Ascó acaba de redactar un plan estratégico para atraer nuevas industrias que debe culminar en 2010, y Vandellòs, Pratdip y Tivissa crearon hace ya cinco años una mancomunidad para impulsar el polígono industrial de Les Tàpies, ubicado en L'Hospitalet de l'Infant, junto a la autopista.

El polígono de Les Tàpies ha asegurado recientemente la implantación de la multinacional norteamericana Manufacturers Service Limited (MSL), que, con una inversión de 3.000 millones de pesetas, suministrará productos informáticos y tiene previsto crear 200 puestos de trabajo.El fin de la vida activa de los dos grupos nucleares de Ascó está calculado para el año 2030. Consciente de esta situación, el municipio decidió encargar un plan estratégico a la consultora madrileña Global Group, que diseñó un plan en tres fases. Tras el análisis de la situación y de la elaboración del plan propiamente dicho, se inicia ahora la tercera fase, consistente en la puesta en práctica de los proyectos.

La situación actual del municipio, según la consultora, no es del todo halagüeña. Ascó es un municipio de 1.700 habitantes y, pese a que su producto interior bruto es nueve veces superior al de Cataluña, de mantenerse las tendencias, perderá habitantes y su población envejecerá. El análisis recoge asimismo que, aun con la existencia de los dos grupos nucleares, las salidas del mundo laboral son mayores que las entradas y las mujeres constituyen uno de los grupos más castigados por esta coyuntura. Las personas mejor formadas abandonan la población, según el estudio.

Si bien la nuclear es una fuente de beneficios -según apunta el informe, el municipio, con un presupuesto de 700 millones de pesetas, recibe del complejo atómico entre el 98% y el 99% de sus ingresos-, "monopoliza de tal manera el sector industrial que hace que cualquier otro esfuerzo empresarial sea puramente marginal", señala el estudio. El informe añade que las empresas existentes en Ascó son las mismas que antes de la construcción del grupo nuclear, iniciado en los años setenta. Un total de 1.500 personas trabajan en el complejo atómico.

Equipamiento municipal

Los ingresos proporcionados por la nuclear han supuesto que el municipio sea uno de los mejor equipados de Cataluña, y dispone de una red telemática y televisión local, lo que significa baza que jugar en el futuro de la población. Los objetivos del plan son, pues, la implantación de nuevas empresas con implicación comarcal, la potenciación del entorno y la mejora de la imagen exterior. La formación profesional será una de las cuestiones en las que hará más hincapié, según explicó uno de los responsables de Global Group, Francesc Ferré, lo que comportará la posibilidad de ofrecer un activo más a las empresas que se dispongan a invertir en el área.