Cultura popular

Música, bailes, convivencia y muestras de productos de la tierra. Esas son las claves del éxito del Festival de Música Tradicional de la Alpujarra que, tras muchos años de celebración, ha logrado el objetivo soñado de borrar fronteras. La Alpujarra, dividida territorialmente entre Almería y Granada, se ha convertido, gracias a la cultura más tradicional, en una sola comarca.La cita de cada verano se concreta este año en la Puebla de Vícar. Será en esta localidad almeriense donde el domingo se congregarán los 25 grupos que está previsto que entren en el concurso del Festival. Fuera de concurso actuarán la Escuela de Trovo de la Alpujarra, el Grupo Infantil de Trovo de Cuba y el grupo 'Barranco Gurrías', de Adra (Almería).

Los organizadores del evento esperan que el domingo pasen por la Puebla de Vícar unas 35.000 personas que podrán disfrutar de las actuaciones folclóricas, pero también de una Feria de Muestras de productos alpujarreños que se concretará en ocho expositores en los que estarán representadas las asociaciones alpujarreñas más destacadas.

El municipio de Vícar, consciente de la importancia de este acontecimiento cultural, ha querido responder con el acondicionamiento especial de dos zonas del muncipio. Una de esas zonas es la Plaza de la Alpujarra en la que se va a instalar un monolito de piedra en el que se inscribirán los nombres de los 60 municipios que conforman la comarca de la Alpujarra. En este monumento, de más de 7 metros de largo por 1´30 de alto, se grabará la inscripción 'Homenaje de gratitud y amistad a los pueblos hermanos de la Alpujarra'.

Este año el presupuesto de premios es de un millón de pesetas. Ese será el dinero que se repartan los grupos que el jurado considere mejores. El resto, se llevarán consigo el orgullo de haber contribuído al hermanamiento de la comarca alpujarreña a través de la cultura.