El 'lehendakari' insiste en que las puertas de Ajuria Enea están abiertas al diálogo para todos
El Gobierno vasco aseguró ayer que el lehendakari, Juan José Ibarretxe, mantiene abiertas las puertas de Ajuria Enea a todos los partidos políticos, y en especial al PP. Sin embargo, la respuesta de los populares, manifestada de inmediato por el secretario general de su partido en Euskadi, Carmelo Barrio, fue una rotunda negativa: "No nos reuniremos con el lehendakari hasta que el PNV rompa los pactos que mantiene con EH". En todo caso, el Ejecutivo vasco afirmó que Ibarretxe continúa manteniendo conversaciones con el resto de las formaciones para tratar de desatascar la situación política actual.
El lehendakari, Juan José Ibarretxe, mantiene abiertas las puertas de Ajuria Enea a todos los partidos políticos y en especial al PP, según confirmaron ayer fuentes del Gobierno vasco. Ibarretxe confía en que el PP vasco levante el veto, ordenado por José María Aznar, que mantiene contra el lehendakari desde que éste decidió no romper con Euskal Herritarrok a pesar de que ETA rompió el alto el fuego y volvió a asesinar.La respuesta del secretario general del PP en el País Vasco, Carmelo Barrio, a esta invitación fue inmediata y contundente: "Nosotros no nos reuniremos con Ibarretxe hasta que el PNV haga una rectificación clara y rompa el pacto político que mantiene con EH, a pesar de tantos muertos." Negativa que fue suscrita a continuación por el portavoz nacional del PP, Rafael Hernando.
No obstante, Ibarretxe dialogó durante aproximadamente diez minutos con el vicepresidente de los populares vascos, Carmelo Barrio, durante la recepción que el alcalde de Vitoria, Alfonso Alonso, del PP, ofreció a la sociedad vitoriana con motivo de las fiestas patronales de la capital la semana pasada. Además, en la manifestación del pasado miércoles en repulsa por el asesinato del empresario Guipuzcoano José María Korta, el lehendakari mantuvo una larga conversación con el vicepresidente segundo del Gobierno y ministro de Hacienda, Rodrigo Rato.
Fuentes del Gobierno Vasco confirmaron que Ibarretxe todavía sigue en conversaciones con el resto de las formaciones vascas para tratar de buscar "puentes al diálogo". De hecho, el PNV va a intentar este mes llegar a alguna clase de acuerdo con los socialistas vascos para desatascar la actual situación política. El lehendakari ha mantenido ya media docena de rondas con los portavoces políticos que no han llegado a buen puerto.
De forma paralela, EH está intentando reactivar un acuerdo entre los partidos nacionalistas. El portavoz de EH, Arnaldo Otegi, declaró ayer que es "posible y necesario" un acuerdo de este tipo. Sin embargo, desde julio los contactos entre el PNV y EA con EH están bloqueados. La ofensiva terrorista dejó en suspenso una reunión de los tres partidos prevista para ese mismo mes.
Otegi precisó que el acuerdo debe darse "primero, entre abertzales, para diseñar las bases democráticas mínimas para construir Euskal Herria y, después, un acuerdo nacional vasco y democrático entre todas las formaciones políticas que operan en este país para diseñar cuál es el campo de juego en el que todos los proyectos políticos se puedan materializar". En su opinión, deberían ser contactos discretos ya que, al margen de cuestiones que pueden debatirse públicamente, otras deben discutirse o plantearse con un cierto "nivel de discreción".
El portavoz de EA, Gorka Knörr, aseguró ayer que su partido ya tiene documentos para empezar a trabajar, pero pidió a EH que sea más explícito a la hora de defender los derechos humanos.
El liderazgo del nacionalismo
Mientras tanto, el parlamentario del PNV y ex consejero vasco de cultura Joseba Arregi, reiteraba que la estrategia de ETA "es llevar al PNV a la oposición" porque sabe que en esa situación será la organización terrorista la que se haga con el liderazgo de "todo el nacionalismo". En este sentido, Arregi abogó por que su partido deje claro ante la sociedad que tiene "un proyecto radicalmente distinto a EH y ETA".En respuesta a las declaraciones del líder de EH, Arnaldo Otegi, que calificó de "compatriotas" a los cuatro etarras fallecidos el pasado lunes en Bilbao al estallarles la bomba que transportaban en su vehículo, Arregi afrimó que la patria de Otegi "es una patria a la que yo no puedo pertenecer y con la que ningún nacionalista democrático puede identificarse".
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