Interceptados 44 africanos en Ceuta, Cádiz y Almería

Más polizones

Cuarenta y cuatro personas magrebíes y subsaharianas que pretendían entrar en la Península de forma clandestina fueron interceptadas ayer por las fuerzas de seguridad en diversas operaciones: 18 en Ceuta, cuando ni siquiera habían abordado todavía la patera en la que pretendían cruzar el Estrecho; 20 recién desembarcadas en una playa de Barbate (Cádiz), y seis polizones que intentaban burlar el control policial en el puerto de Almería tras haberse introducido en el barco Beni Anzar, procedente de Nador (Marruecos).La Patrulla de Vigilancia Costera de la Guardia Civil en Ceuta interceptó a primera hora a 18 marroquíes que se ocultaban en la playa conocida como El Desnarigado, en la bahía sur de la ciudad, cuando esperaban la embarcación con la que pensaban alcanzar las costas gaditanas, según informó la Delegación del Gobierno.

Los inmigrantes, todos varones salvo una mujer, de 40 años, procedían de Beni Mellal, al norte de Marruecos, y habían pagado cantidades que oscilaban entre las 150.000 y las 200.000 pesetas por su viaje. En esta ocasión no figuraba ningún menor entre los expedicionarios. Todos ellos fueron devueltos de inmediato a su país.

Ya son más de 400 los marroquíes interceptados en Ceuta o en aguas próximas con la intención de llegar de manera ilegal a la Península en los siete primeros meses de este año. En total, se han intervenido 70 pateras y medio centenar de embarcaciones neumáticas.

Por otra parte, 20 subsaharianos, que dijeron proceder de Nigeria y Sierra Leona, fueron detenidos por la Guardia Civil cuando acababan de desembarcar en la playa de Los Castillejos, en Los Caños de Meca, en la pedanía de Barbate (Cádiz). Se trata de 15 hombres y cinco mujeres, con edades de entre 18 y 30 años, que también serán repatriados de inmediato.

En el puerto de Almería se detectó también a seis polizones a la llegada de un buque procedente de Nador. El día anterior otros tres fueron arrestados tras haberse arrojado al agua en el último momento.Según fuentes de la comisaria almeriense y de la Guardia Civil, uno de ellos presentó un pasaporte que carecía de visado y mostraba irregularidades y los otros intentaron en vano mezclarse con el pasaje normal.

Mientras tanto, la Delegación del Gobierno en Melilla ofreció ayer el traslado gratuito hasta Argelia y Pakistán a los 47 ciudadanos de esos países contra los que ha dictado orden de expulsión para evitarles trámites incómodos y que su vuelta a casa sea como "si hubieran estado de vacaciones".