Los hoteles de Sierra Nevada abiertos en verano registran una ocupación media del 50% La estación granadina refuerza cada año su oferta estival de actividades deportivas y culturales

"Sierra Nevada, también en verano". Este es el eslogan con el que los responsables de la estación de esquí granadina intentan, desde hace hace varios años, promocionar el complejo y recordar que la sierra mantiene su atractivo turístico cuando se derriten las nieves que la cubren en invierno.Cetursa, la empresa pública de la Junta de Andalucía que gestiona la estación, viene desarrollando desde hace varios veranos un completo programa de actividades que se amplía cada año. La mayor parte de la oferta se centra en actividades deportivas o relacionadas con la naturaleza, como paseos a caballo o rutas para conocer la flora autóctona. Aunque cada vez son mayores las posibilidades culturales y educativas: a los tradicionales cursos de idiomas y a los de verano que la Universidad de Granada organiza en la sierra, este verano se ha añadido un original curso para aprender a tocar instrumentos de cuerda.

Estos alicientes, unidos a los 20 grados centígrados de media en las jornadas estivales, parecen empezar a dar sus frutos. Según Cetursa, el número de visitantes crece poco a poco cada verano. Desde el pasado mayo, mes en que finalizó la temporada invernal de esquí, han visitado la estación alrededor de un millar de turistas. De ellos, el 60% son extranjeros que mayoritariamente proceden de Francia, Inglaterra y Alemania. El restante 40% de españoles suele llegar desde Andalucía, Madrid y Alicante.

Este pequeño pero constante flujo de montañeros, estudiantes y turistas permite a los seis hoteles de Pradollano que permanecen habiertos este verano mantener una media de ocupación del 50%, según Cetursa. La misma proporción de camas ocupadas tienen durante la época estival el albergue de la Junta y la residencia Tiempo Libre, también de titularidad pública.

Las actividades lúdicas y deportivas organizadas en Sierra Nevada durante el verano intentan aprovechar las excelencias del paisaje y la biodiversidad de un entorno recientemente declarado Parque Nacional. Estas son algunas de las ofertas.

- Actividades medioambientales. Aunque han sido programadas especialmente para grupos de escolares están abiertas a todas las edades. Plantean la posibilidad de visitar el vivero de árboles y plantas del que se nutre la estación para repoblar; posee una notable colección de bonsais de árboles autóctonos, un estanque con truchas y un "voladero" con distintas aves. Aunque, quizás, la actividad ecológica más atractiva son las excursiones para conocer la flora endémica de Sierra Nevada, compuesta por más de un centenar de plantas autóctonas.

- Excursiones a pie y a caballo. Cetursa propone un total de nueve rutas guiadas a pie por los diferentes ecosistemas de Sierra Nevada. Cuatro de ellas tienen una duración de tres horas y ofrecen escasa dificultad para el caminante, aunque una de ellas discurre también por alta montaña. Las cinco restantes tienen una duración de seis horas y discurren por las lagunas glaciares, prados de media montaña y algunos de los bosques mejor conservados.

Los paseos a caballo duran media o una jornada y pueden elegirse ocho rutas diferentes.

- Programas anti-estrés y de adelgazamiento. El Club Trevenque ofrece unas instalaciones a caballo entre un balneario y una clínica de belleza. Los servicios ofertados van desde los masajes, jacuzzis, saunas y baños turcos hasta el lifting, el peeling o los tratamientos anticelulíticos. Aunque la atracción estrella del complejo es la piscina climatizada. Una enorme bóveda corrediza de cristal permite cubrirla en invierno y dejarla al aire libre en verano.

- Cursos de idiomas. Unos cien niños han asistido en julio a los cursos intensivos de inglés y alemán. Son impartidos por profesores nativos y se compaginan con actividades al aire libre: senderismo, tiro con arco, baloncesto, tenis de mesa...

- Cursos de música orquestal. La novedad de este año. Son cursos de perfeccionamiento dirigidos a niños de entre 7 y 15 años que estén estudiando violín, viola o violonchelo. Incluyen alojamiento, pensión completa y actividades culturales y deportivas paralelas.

- Programa de astronomía. Con cuatro telescopios a 2.100 metros de altitud y una charla impartida por personal del CSIC. Requiere reserva previa y condiciones climáticas óptimas.