Cuando la vida era joven
Cuando la vida era aún joven, un grupo de escritores creó en San Sebastián el grupo surrealista Cloc. Sus andanzas dieron lugar a una explosión de creatividad, a una obra, entonces más bien escasa, y a la aventura creativa de tres personas: Fernando Arámburu, Álvaro Bermejo y José Félix del Hoyo. Dos de sus participantes son ahora reconocidos escritores. Arámburu usó las andanzas del grupo como fondo narrativo en su novela Fuegos con limón. La obra narrativa de Bermejo se ha ido consolidando con el tiempo.Juan Manuel Díaz de Guereñu, junto con Juan José Lanz uno de los críticos más solventes en este país, acaba de publicar Cloc. Historia de arte y desarte (1978-1981), en la prestigiosa editorial Hiperión. La obra analiza la historia de este grupo de vanguardia, iconoclasta y rebelde, que en el tiempo en el que permaneció vivo llevó a cabo la vieja propuesta surrealista de mezclar arte y vida.
El grupo Cloc, que tomó su nombre del sonido que, según definición humorística, "producen veinte mil garbanzos arrojados desde el octavo piso contra las cabezas de los ignorantes", se adscribió a la vanguardia y comenzó su andadura mediante un anuncio de periódico que llamaba a una reunión de escritores surrealistas. La acción -en algún caso bromas de gusto discutible, en otras pintadas en el Peine de los Vientos de Chillida- y la escritura fueron dando lugar a una aventura en la que iban de la mano la provocación del burgués -utilizando a veces la sección de cartas al director -, la publicación de una revista humildísima, y la escrutadora escritura personal, que comenzaba a ganar los primeros premios. La broma, la parodia, el humor y la crítica se dirigían contra una sociedad gris satisfecha de sí misma en la que el pensamiento político era la preocupación mayoritaria.
Díaz de Guereñu ha escrito la protohistoria, de una manera documentada, gracias a la colaboración de los protagonistas del grupo, de los componentes de esa loca aventura por la libertad. A veces el estudio da la impresión de ser un trabajo meticuloso sobre una obra no muy desarrollada. Pero, en cualquier caso, la historia de la literatura vasca escrita en castellano tiene en Díaz de Guereñu a un atento crítico.
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