Los editores valencianos creen "intervencionistas" las medidas sobre el libro

Las librerías de barrio y rurales serán las más perjudicadas, con riesgo de desaparición, por las medidas adoptadas por el Gobierno que afectan al sector del libro. Así lo vaticina la Associació d'Editors del País Valencià tras una asamblea general extraordinaria celebrada para estudiar y debatir las medidas gubernamentales que, más que "liberalizadoras", consideran "intervencionistas".

"Hablar de liberalización es pura demagogia, se trata de una medida intervencionista", asegura la presidenta de la Associació d'Editors, Verónica Cantó. "No hay otro artículo, sea o no de consumo que tenga este tratamiento en la OCDE", denuncian los editores valencianos en un comunicado que recoge las conclusiones de su asamblea extraordinaria. Su oposición frontal a las medidas liberalizadoras de los descuentos en los libros de texto se basa en dos razones básicas. Por un lado, porque "induce a la venta con pérdidas", es decir, por debajo del costo del producto. Se trata de una estrategia comercial que, denuncian, está "encaminada a aumentar la venta de otros productos -y no solamente material escolar- que comparten espacio físico con los libros. La otra razón fundamental aducida por los editores es que se sitúa al libro "en un permanente periodo de rebajas". Ambas anomalías, están relacionadas, según la asociación, con dos ilegalidades: las leyes españolas y comunitarias prhiben expresamente la venta con pérdidas y, por otro lado, las rebajas han de atenerse a una regulación específica, de lo contrario son ilegales.

"Los grandes beneficiarios de la medida son las grandes superficies", apunta el comunicado de los editores valencianos. Por contra, las principales perjudicadas, señala su presidenta, "serán las librerías de barrio y las rurales, más que las especializadas, con el consiguiente riesgo de desaparición". Ese peligro aletea, según los estudios de que dispone el sector a nivel estatal, sobre unas 200 librerías valencianas.

Para el conjunto de los editores, la entrada en vigor de estas medidas creará discriminaciones, "puesto que unos podrán aceptar los descuentos reclamados por las grandes superficies y otros no".

La asamblea de los editores también analizó la reutilización y gratuidad del libro de texto, pronunciándose en contra de ella en razón de una serie de efectos perversos. La asociación anuncia que la reutilización de libros impeirá la actualización de materiales educativos, creará desigualdades en el alumnado, fomentará la fotocopia y, a corto plazo, provocará su encarecimiento y una diminución de la oferta y una reducción de la oferta y diversidad editorial.