El 'señor Nilsson' y dos capuchinos
Los tres monos amazónicos que decomisó ayer la Guardia Civil en el aeropuerto de Barajas son cachorros machos de entre seis y diez meses. Estos animales están protegidos por la ley por su escasa población y no se pueden emplear como animales de compañía salvo en casos excepcionales. Dos de ellos son monos capuchinos, una especie muy inteligente que puede hacer determinadas funciones de compañía de manera excepcional, pues se les entrena como ayudantes para las personas discapacitadas -pueden hasta marcar un número de teléfono en caso de emergencia-. El tercero es un mono saimirí, de la misma especie que el Señor Nilsson, el primate amigo de Pippi Calzaslargas, protagonista de una serie de televisión.
Los tres primates llegaron a Barajas desfallecidos, aunque el hombre que los trajo les dio de beber durante el viaje. Improvisó un recipiente con un envase de leche que cogió de la comida del avión a modo de cuenco para que los primates bebieran. Aun así, los monos estaban desnutridos. No habían comido en condiciones desde hacía un par de días. Fernando Tasara, el veterinario del Safari Madrid que se hizo cargo de ellos, los llevó a la enfermería del zoológico. A dos de ellos les tuvo que poner una vía subcutánea con un gotero de suero. También les dio de comer. "Como son bebés, les he dado leche maternizada, como la que se compra en farmacias, y papillas para niños", añadió Tasara. "Han devorado la comida porque venían muy hambrientos", añadió. Dos de los monos tosían "un poco". Tasara les dio un antibiótico para curarles.
Los monos deberán pasar por un periodo de cuarentena de unos 50 días para asegurar que no portan enfermedad alguna que pueda contagiar a otros animales.
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