Zaplana y Blasco disienten sobre el papel del Consell en la Ley de Extranjería

Eduardo Zaplana, presidente del Consell: "No tendría sentido que cada una de las comunidades autónomas tuviera que estar proponiendo, en lo que tiene que ser el marco legal, cuál es su posición concreta sobre la reforma de la Ley de Extranjería".Rafael Blasco, consejero de Bienestar Social: "La petición de Jordi Pujol de que las autonomías participen en la reforma de la Ley de Extranjería es una posición aceptable".

Matices al margen, el presidente del Consell y su consejero no coincidieron ayer en las valoraciones sobre el papel de las autonomías en la discusión de la reforma. Blasco fue más lejos: "Hay zonas, como las comunidades catalana y valenciana, que son lugares de especial recepción de personas inmigrantes, por lo que la voz de nuestro planteamiento se tiene que tener en cuenta en un contexto nacional", dijo.

Y Zaplana, en rueda de prensa junto al ministro de Administraciones Públicas, Jesús Posada, abogó por lo contrario: priorizar el contexto nacional y luego, si se puede, "tomar alguna serie de decisiones" en la Comunidad. Es decir, que el presidente aboga por las tesis de José María Aznar, y Blasco se inclina más por las del presidente catalán.

Ambos matizan sus declaraciones, aunque no lo suficiente para romper la discrepancia de fondo. Blasco sostiene que la inmigración debe abordarse bajo una concepción global, puesto que ese mismo problema lo tiene el resto de países de la UE. "Me parece bien que Pujol quiera que la voz de Cataluña se oiga, pero tiene que estar complementada con los criterios generales a nivel del Estado y de la Unión".

Zaplana, por su parte, dijo que tras la aprobación de la ley, las comunidades más afectadas por la inmigración pueden tomar partido a través de relaciones bilaterales, para adaptarlos e integrarlos en el tejido productivo y social.