Países de letras

Un montaje teatral defiende los derechos del lector para acercar los libros al público infantil

Tópicos nocivos

,Un chico visita con su clase una biblioteca. Un gigantesco libro llama su atención. Su curiosidad convoca a un personaje, el guardián del libro, que le invita a entrar en él. Juntos recorren los países ficticios de Librolúgubre, Librocampaña, Libroservicio y Librolibre. En ellos, los tomos actúan, se transforman e intentan atrapar el interés del muchacho, siempre inmerso en un ambiente a caballo entre el misterio y la fantasía, que contagia al espectador. Así es Librosss, el espectáculo de formato clásico con el que los actores de Cataplof Teatro vienen difundiendo el amor por la lectura entre el público infantil.La compañía, fundada en Cádiz por José Maestro Sarrión y Luis Rodríguez Neila, va camino de cumplir siete años sobre los escenarios. Durante este tiempo, han desarrollado técnicas tan diversas como teatro de sombras, el cuentacuentos, la magia o el montaje de títeres con material de reciclaje.

Pero nunca habían afrontado un desafío como el de Librosss, para cuya producción han contado con la ayuda de la editorial Anaya.

"Cuando vemos los planteamientos tan equivocados que se realizan a la hora de difundir la lectura, tan aparatosos, sentimos que al final el libro queda arrinconado en lugar de asumir el protagonismo", explica José Maestro. "En este sentido, nuestra apuesta se dirige a explicar, con un ritmo escénico adecuado, la idea de la lectura como placer. Es un ejercicio que tiene que nacer de la voluntad de alguien que quiere disfrutar", añade.

Para lograrlo, el programa de mano de la obra viene encabezado por los Derechos del lector, el decálogo que firmara en su día el escritor francés Daniel Pennac en su ensayo Como una novela: el derecho a no leer, a saltarse las páginas, a no terminar un libro, a releer, a leer cualquier cosa, a enfermar de la emoción, a leer en cualquier lugar, a hojear, a leer en voz alta y, por último, el derecho a callarnos.

"Debemos entender que leer es difícil: requiere concentración, soledad, un esfuerzo de la imaginación. Tal vez por eso nos parece tan nocivo el tópico de que los niños no leen como el ejercicio de las lecturas obligatorias", explica Maestro. A lo largo del medio centenar de representaciones que ya llevan realizadas, los miembros de Cataplof han podido constatar "la respuesta más que positiva no sólo de los chavales que ven la obra, sino también de los maestros, que encuentran en ella una estupenda excusa para hablar con ellos sobre los libros".

Por si fuera poco, la obra Librosss ha dado a Maestro Sarrión y a Rodríguez Neila la posibilidad de defender desde el escenario no sólo el placer de la lectura, sino también el sentido de su oficio. "El teatro es otro de los grandes retos educativos actuales", comentan. Y concluyen: "Ahora, los colegios acuden con mucha frecuencia al teatro. Vemos que los niños siempre le dan ese aspecto de diversión, tipo corral de comedias. Pero son un público difícil: si algo no les gusta, se encargan de demostrarte enseguida que eso no funciona. Por eso, tanto en Librosss como en el resto de nuestros montajes perseguimos ese punto álgido en el que aplauden y gritan, el que confirma que ya están metidos en la obra".