El diseño de coches se instala en Barcelona

Cataluña, y Barcelona en particular, están dando pasos para convertirse en un polo importante de diseño de automóviles. En los últimos años, Barcelona ha pasado de ser noticia por albergar la fábrica más moderna del grupo Seat (Martorell), a recibir a los departamentos de diseño de los principales grupos europeos del mundo del automóvil: Volkswagen, Renault, Volvo y Seat.El último gran aldabonazo procede de uno de los grandes del diseño italiano: Giugiaro, que ha decidido invertir junto al IDIADA, de l'Albornar, que el año pasado la Generalitat vendió al grupo Agbar.

Giorgetto Giugiaro es propietario de Italdesign-Guigiaro. Es el padre de más de 100 modelos de coches y mantiene centros especializados en California, Tokio, París y Alemania, además de la casa central italiana.

La California de Europa

Asko Piirainen, un finlandés recién llegado a Sitges en 1995, para formar parte del primer equipo de diseñadores del centro Volkswagen-Audi-Seat-Skoda, afirmaba: "España es como la California de Europa. No comprendo como las multinacionales aumentan su presencia en los polígonos españoles con fábricas de química básica en lugar de enviar aquí a sus investigadores y a su cerebro en lugar de su músculo".

Para Jordi Conejos, director general de Industria de la Generalitat, "quizá no sean grandes centros de trabajo, con miles de empleados, pero estos centros tienen una enorme importancia porque se trata de personal altamente cualificado, y consolidan Barcelona y Cataluña como un lugar de referencia para empresas de esta magnitud".

Sitges fue el primer emplazamiento de un car design center alejado de las frías e incluso vetustas estructuras industriales del grupo VW-Audi, cuyo mejor exponente es la sede central del grupo alemán en la ciudad de Wolfsburg.

La llegada de los diseñadores la han notado las agencias inmobiliarias, el club de golf, los restaurantes. Y eso que son pocas personas, pero tienen una rotación muy alta. "Muchos acaban comprando alguna propiedad inmobiliaria en Sitges, aunque ya no trabajen aquí. El resto recibe sin cesar amistades de sus países de origen", afirman fuentes del Ayuntamiento de Sitges.

El Centro de Diseño Europeo del grupo Volkswagen en Sitges es el único que realiza estudios para las cuatro marcas del consorcio (VW, AUDI, Seat y Skoda). Su director técnico es el francés Gregory Guillaume, que dirige un equipo plurilingüe y multinacional en el que predominan el inglés y el alemán, pero donde conviven ingenieros norteamericanos, japoneses o coreanos. big bang operado en Seat en los últimos años también ha precipitado los cambios en el departamento de diseño. Hace menos de 18 meses, Seat decidió fichar, talonario en mano, a uno de los grandes del diseño, el italiano Walter de Silva, de 49 años, una de esas personas que ha conseguido conservar el apellido en la Europa posindustrial sin tener que ver nada con Internet.

De Silva, ya instalado en Martorell, pone el dedo en la llaga cuando habla de "impregnarse de Mediterráneo". Eso es lo que buscan todos. El diseñador alude a la calidad de vida y a la alianza con la luz y las cosas bellas para conseguir despertar las emociones del comprador. Es obvio que De Silva sabe vender, muchos le atribuyen incluso el cambio del logotipo de la marca al rojo institucional, aunque apareciera antes de su llegada. En el centro de Seat trabajan 60 personas además de unos 30 externos, con lo que completan unas 90 personas.

Thierry Metroz es un diseñador francés que allá en Billancourt ya dejó su firma, por ejemplo, en el Espace. Ahora es el responsable de Renault Design Center de Barcelona, que tiene una superficie de 830 metros cuadrados repartidos en dos pisos de una antigua fábrica textil en la calle de Trafalgar de Barcelona. El centro está a un paso del Palau de la Música, un especie de salón de reposo, de balneario para la gente responsable del diseño de la marca francesa que acaba de asumir las responsabilidades sensoriales de los modelos de su ahora socio Nissan.

La apuesta de Renault por Barcelona tiene más que ver con exponer las papilas olfativas en una gran capital mediterránea que con el clima. De hecho, Renault -que eligió un viejo edificio en la calle de Trafalgar, en mitad del barrio de la confección, al por mayor, repleto de establecimientos hindúes o chinos- quiere estar en el meollo de la vieja ciudad.

Los chicos del centro de diseño de Renault en Barcelona son 11 y le han hecho a medias un guiño y un reconocimiento al diseño catalán incorporando la colaboración del Barcelona Centre de Disseny (BCD) y del Estudio Mariscal, del diseñador padre del muñeco olímpico Cobi.

La sueca Volvo también va a instalar en Barcelona su primer centro de diseño fuera de Suecia. El responsable de diseño de Volvo es el mexicano José Díaz Vega, que destaca como valor útil de Barcelona "el vanguardismo creativo, su tradición artística, así como la arquitectura de la ciudad, que favorecen el contagio creativo".