La geoda gigante de Almería será declarada monumento natural

Una reunión celebrada ayer en Pulpí (Almería) entre representantes de las administraciones regionales y locales, científicos y particulares relacionados con el descubrimiento de una gigantesca geoda en ese término municipal, ha puesto las bases para la protección del importante hallazgo geológico. La Consejería de Medio Ambiente de la Junta ha anunciado la declaración del enclave geológico como monumento natural.

La iniciativa se desarrollará por la vía de urgencia para proteger legalmente la gigantesca cavidad rocosa. La geoda, ubicada en una antigua mina de plata, a 30 metros de profundidad, mide ocho de longitud, 1,7 de altura y 1,8 de ancho y está enteramente tapizada por grandes cristales de yeso de extraordinaria transparencia. El modelo de gestión ha quedado confiado a una comisión de expertos, integrada por miembros de la universidad, del CSIC, las consejerías de Empleo y de Nuevas Tecnologías, Cultura y Turismo y el propio Ayuntamiento de Pulpí.

La comisión, con carácter permanente, mantendrá reuniones periódicas para decidir la explotación logística del descubrimiento. Se ha acordado la contratación de una asistencia técnica de ingenieros de minas y expertos para "conocer" el nivel de inseguridad potencial de la geoda. Los asistentes destacaron el mérito del hallazgo, el pasado 5 de diciembre, por parte de seis personas del Grupo Mineralogista de Madrid, que edita la revista Bocamina. Uno de los componentes de ese equipo, el coleccionista y geólogo aficionado Ángel Romero, asistió también a la reunión de Pulpí ayer y confirmó la notificación hecha por su grupo poco después del descubrimiento a la propia delegación de Medio Ambiente y la Universidad de Almería.

"Es muy loable que los propios descubridores de la geoda hayan contactado con investigadores y con la Administración. Los mineralogistas de Almería son magníficos y tienen una conciencia ambiental que supera todo pronóstico", aseguró el profesor de la Universidad de Almería experto en yesos José María Calaforra.

Tras la reunión, el geólogo Javier García-Guinea, del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), alabó la actuación de los miembros de Bocamina. García-Guinea, después de explorar la geoda, dio a conocer el hallazgo (véase EL PAÍS del pasado 10 de junio). "Cuando vimos aquello, pensamos que no podía quedar abierto por el riesgo de expolio. El esfuerzo se ha centrado en cerrar esos accesos y tuve que dar la lata a muchísima gente para que se cerraran", aseguró.