El PP aprovecha el archivo de la querella contra ex directivos de RTVV para descalificar al PSPV

La decisión del juez de Paterna que ha archivado la querella presentada por el PSPV contra seis altos cargos o ex cargos de Ràdio Televisió Valenciana (RTVV) constituye un "varapalo" que "ridiculiza" a los socialistas, según el Partido Popular, que ayer volvió a salir en tromba para denunciar al principal partido de la oposición por haber presentado lo que calificaron como una "querella basura". Según los populares, el auto "avala la rectitud, la honestidad y la transparencia" de los directivos del ente público, a los que el PSPV acusó de cuatro delitos: societario, tráfico de influencias, cohecho y malversación. El PP descalificó también a los medios de comunicación que intentan "arrojar sombras" sobre su gestión.

Como ya viene siendo habitual siempre que tiene ocasión de atacar a los partidos de la oposición, el PP se prodigó ayer en declaraciones en relación con la decisión del juez de Paterna que ha dictado el sobreseimiento provisional de la querella del PSPV contra directivos de RTVV. El portavoz del Grupo Popular en las Cortes Valencianas, Alejandro Font de Mora, y Antonio Lis, portavoz en la Diputación y miembro del consejo de administración del ente público, salieron a la palestra para sacar provecho de la decisión judicial. "Nos interesa recalcar el fundamento básico del auto" dijo Font de Mora, "que es que se han desvanecido los indicios de criminalidad". El portavoz popular se refirió al "efecto perverso" de la querella que cita el juez en su auto en relación con el principio de presunción de inocencia y señaló que esa perversidad se produce "desde el momento en que se presenta una querella sustentada en material inútil desde el punto de vista procesal y penal". Según Font de Mora, estamos ante un "ejemplo de querella basura".Pero la ofensiva de los populares no se dirigía sólo a la oposición socialista, sino también a "determinados medios de comunicación" que, según Font de Mora, han sustentado "una auténtica campaña" destinada a "arrojar sombras" sobre el PP. El portavoz del Grupo Popular citó expresamente a los diarios ELPAÍS y Levante, a los que implicó en un supuesto caso de "contaminación informativa" que equiparó con la medioambiental, para añadir que, al igual que en el medio natural, "quien contamina, paga". No quedó ahí la cosa, ya que Font de Mora esgrimió fotocopias de las informaciones publicadas por ambos periódicos cuando se presentó la querella, que comparó con las ofrecidas ayer, tras la decisión de sobreseimiento provisional, y lamentó la "desproporción" entre unas y otras. Para sustentar la opinión de su partido, el diputado del PP recurrió a un argumento de peso: con las fotocopias en la mano, dijo que las informaciones que "arrojan sombras" sobre el PP y los directivos de RTVV sumaban "310 gramos", frente a los "40 gramos" que, aseguró, pesaban las fotocopias de las informaciones que "arrojan luz" sobre el caso.

"Ineptitud"

Tras esta referencia, Font de Mora volvió a cargar contra los socialistas, aunque sin olvidarse de los medios de comunicación. "Los querellantes han demostrado su ineptitud", dijo, porque han presentado una querella "técnicamente impresentable", según dice el juez en el auto. Los socialistas, añadió el dirigente popular, "carecen de iniciativa y operan al dictado de los medios, construyen querellas con recortes de prensa" y, en definitiva, "son títeres movidos por hilos de papel prensa". La oposición se encuentra en "un estado menesteroso respecto de su propia capacidad", agregó Font de Mora.

Acto seguido, el portavoz del PP intentó meter cizaña en las filas socialistas: "Las querellas pueden retirarse de la misma manera que se interponen", afirmó, "y no vale decir que fue el ex secretario general del PSPV Joan Romero quien la presentó y los demás marcharse de rositas". Font de Mora añadió que si los dirigentes que sucedieron a Romero "pensaban que la querella no tenía objeto, podían haberla retirado y no lo hicieron". Además, dijo que "hicieron ostentación de ella en las Cortes Valencianas y la utilizaron como arma arrojadiza en el foro político".

Por su parte, el consejero del PP en RTVV Antonio Lis, que también se atuvo al guión marcado por el partido, afirmó que la decisión del juez supone un "varapalo" que "ridiculiza" al PSPV. El secretario del consejo de administración del ente público, en la línea de Font de Mora, atacó sin tapujos a los socialistas, a los que instó tanto a "la reposición pública de la imagen de RTVV y de la honorabilidad de los ex directivos" imputados en la querella como a la resolución "su crisis interna".

Según dijo, "esta división afecta negativamente al funcionamiento de muchas instituciones y los ciudadanos les pasarán factura por ello". Lis, repicando los argumentos del juez, manifestó que la denuncia presentada por el PSPV "proviene del escenario de la contienda política" y "es propia del pensamiento totalitario, porque parte de la idea de que los acusados son posibles y más que probables culpables".

El consejero de RTVV también advirtió al abogado y presidente de la gestora del PSPV Francisco Granados -al que calificó como "deficiente dirigente político y deficiente abogado"- sobre las consecuencias del posible recurso al auto de archivo. "Está en su derecho de proseguir el camino imparable hacia el ridículo".