El género histórico y la intriga predominan en las nueve novelas finalistas al Premio Ateneo de Sevilla
Nueve obras compiten por el XXXII Premio Ateneo de Sevilla de Novela, dotado con siete millones de pesetas, y otras cuatro han quedado finalistas para el V Premio Ateneo Joven -galardonado con dos millones de pesetas por la empresa Migasa-, que se fallan hoy en un hotel de la capital andaluza. Al primero, patrocinado por Cajasur, han concurrido este año 214 novelas, de las que 56 también se presentaron al certamen para autores menores de 30 años, según informó ayer Francisco Prior, director de publicaciones del grupo Anaya y de la editorial Anaya, que publicará las obras ganadoras de ambos certámenes.En cuanto al género, Prior Indicó que predominan, por este orden, las de carácter histórico, seguidas de las de intriga y novela negra, las historias de amor e intimistas, y las de aventuras y viajes. Entre los autores jóvenes, el responsable de publicaciones de la editorial destacó el aumento de la novela de carácter experimental.
También señaló un incremento de las obras procedentes de América, especialmente de Argentina, México, Cuba, Chile, Puerto Rico y Estados Unidos, aunque gran parte de los textos presentados son de autores españoles. De éstos, llegaron 32 obras de Madrid, 18 de Barcelona, 13 de Sevilla, 10 de Valencia y otras 10 de Zaragoza. Otras 24 han sido enviadas desde diversas capitales andaluzas y en 65 novelas no consta la procedencia.
Las novelas finalistas del Ateneo de Sevilla de Novela son: Juan de Austria. Historia de una ambición, de Ángel Martínez Pons, que recrea la turbulenta vida del hermanastro de Felipe II; La noche que iba a cambiar el mundo, de David Lerma Martínez, sobre tres generaciones que viven la guerra civil, la transición democrática y el fin de año de 2000; Nomenclatura Borghini para los dedos de los pies, de José Melero Martín, que narra el descubrimiento que hace un bibliotecario de un texto misterioso; Bellísimas personas, de Buena Persona (pseudónimo), la historia de un asesino; Enredo en Banaljazmín, de Lewis Viana (pseudónimo), que cuenta la investigación de un suceso por un periodista; A ritmo de traviata, de Rodrigo de Leiva (pseudónimo), una historia de marginación y drogas; Santo Oficio, de Santo Oficio (pseudónimo), que recrea el ambiente literario y artístico de Sevilla, y El arco de la luna, de Emilio Ruiz Barrachina, una novela de intrigas políticas ambientada en la Cartagena de Indias colonial.
Las cuatro finalistas del Ateneo Joven son El regalo de Eva, de Álvaro Colomer; Coloquios matrimoniales, de Paloma Esquinas; Autor, autor, de Yo, el autor (pseudónimo), y La conspiración del temple, de Ignacio del Burgo. El jurado de ambos premios estará constituido por Enrique Barrero, presidente del Ateneo; Aurelio Verde, Antonio Silva, el escritor Antonio Rodríguez, el periodista Luis de Val y Miguel Ángel Matellanes, de Algaida.
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