SOS
Busco a diario en la lectura de la prensa algún artículo que clarifique qué es o qué va a ser la izquierda (esa postura siempre incómoda que tiene como objetivo vencer la inercia de la sociedad, siempre tendente a la injusticia, para crear un mundo donde quepamos todos) y sólo encuentro discusiones entre guerrismos incombustibles, Zapateros remendones preocupados por los negocios, Cristinas y Rosas, Bonos y Felipes, y todos a ver quién es más guapo o guapa.Pero no oigo decir a nadie qué va a pasar con una amiga mía que tiene que pasar el mes con 85.000 pesetas pagando hipoteca y gastos a su hijo; con mi vecina, una mujer de pensionista que cobra 50.000 pesetas mensuales. Ella tiene que ir, para sobrevivir, con la artrosis y sus 60 años encima, a limpiarle la casita a señoritos-as que ganan 250.000 pesetas al mes y le pagan a ella 800 pesetas la hora, sin seguridad social, por sus servicios. Señoritos y señoritas que en muchas ocasiones militan incluso en sindicatos y dicen que son de izquierdas. ¿Qué va a pasar con mi hijo, que no sé si tiene garantizada una educación mínimamente de calidad en la escuela pública a la que asiste, y qué me pasará a mí si, angustiado por la situación, cojo una enfermedad de corazón y me tienen que operar?
Por favor, los que son de izquierdas por ansia de poder, por esnobismo, por aburrimiento, por estética, que empiecen a pensar en los que somos de izquierdas por pura necesidad y empiecen a ser de izquierdas por solidaridad o, al menos, por filantropía.- J. Ramón Serrano Andreu. Altea, Alicante.