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Estallan dos bombas de los GRAPO en empresas de trabajo temporal de Madrid

Los ataques elevan a nueve los atentados perpetrados en cuatro días

La policía atribuye a los Grupos de Resistencia Antifascista Primero de Octubre (GRAPO) la colocación de dos artefactos de fabricación casera que estallaron en oficinas de dos empresas de trabajo temporal (ETT) de Madrid, sin causar heridos. Los artificieros desactivaron un tercer artefacto en otra ETT. Con éstos son ya nueve los atentados de este tipo perpetrados durante los últimos cuatro días en cuatro regiones españolas.

Las explosiones se registraron en distintos puntos de la capital en un intervalo de dos horas. La primera se produjo a las cinco de la madrugada en la oficina de la ETT Adecco de la calle de Alcalá número 624 (distrito de San Blas). Uno de los terroristas rompió la luna del establecimiento y arrojó dentro el artefacto. La explosión derribó parte del falso techo, hizo añicos la cristalera del establecimiento y causó destrozos en el mobiliario.Una vecina del inmueble recordaba ayer la explosión: "Hacia las cinco de la mañana estaba acostada, dormida, cuando me despertó un enorme estruendo, como si fuera un trueno muy fuerte que cae cerca de tu ventana. Me llevé un susto tremendo", explicó. "Luego vi cómo una gran cortina de humo tapaba la ventana, era una humareda de polvo grisáceo", añadió.

La segunda explosión ocurrió hora y cuarto después, en otra oficina de una ETT situada en el paseo de las Delicias, 32 (Arganzuela). El artefacto explosivo estaba colocado en el interior de la oficina, situada en la quinta planta del inmueble. La explosión dañó el mobiliario del local. La policía sospecha que los terroristas escondieron el explosivo en la oficina el día anterior y lo hicieron estallar de madrugada mediante un temporizador. Un vecino del inmueble alertó a la policía por teléfono. Afirmó haber oído una detonación y la rotura de los cristales de la oficina. La Policía Municipal cortó el tráfico en la zona durante hora y media, hasta que los agentes de la Jefatura Superior de la Policía comprobaron que no había más artefactos explosivos en el lugar.

El grupo de Técnicos en Desactivación de Explosivos (Tedax) evitó una tercera explosión a mediodía de ayer. Se trataba de un artefacto de fabricación casera que estaba colocado en una oficina de otra ETT. Un hombre llamó desde una cabina pública de teléfono a la policía y les advirtió de la colocación de la bomba. Les indicó el lugar donde estaba colocada, pero no se identificó como miembro de ningún grupo terrorista. El artefacto explosivo estaba envuelto en papel de regalo y adosado al lavabo de la oficina que la ETT Laborman tiene en el quinto piso de la avenida de Burgos, número 16 (distrito de Chamartín).

El artefacto explosivo estaba compuesto por un temporizador y dos detonadores. La policía desalojó el edificio para evitar daños personales al realizar la voladura controlada. Los Tedax provocaron el estallido, que produjo escasos daños materiales.

Con las dos explosiones de ayer y la tercera frustrada, son ya nueve los atentados perpetrados contra oficinas de ETT o juzgados en distintos puntos de España durante los últimos cuatro días.

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El miércoles pasado, los Tedax hicieron estallar de forma controlada dos artefactos explosivos metidos en una mochila colocada en la puerta del Registro Civil de Valencia. Un día después, los terroristas colocaron cuatro artefactos explosivos en una ETT de Barcelona. El viernes, la policía explosionó una bomba que un encapuchado colocó en la fachada de los juzgados de Miranda de Ebro (Burgos).

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