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Castell dice que hay que cambiar todo el sistema educativo para abordar la sociedad de Internet

El seminario sobre la sociedad de la información y sus repercusiones éticas y sociales organizado por la Fundación Airtel que se inauguró ayer en Sevilla ofreció distintas posturas desde donde mirar la globalización económica y sus consecuencias. El catedrático de sociología Manuel Castell presentó un panorama mitad tranquilizador, mitad preocupante, ante la globalización de la economía y sus consecuencias. El director de opinión de El PAÍS, Joaquín Estefanía, mostró la cara más amarga de una economía sin control que sobrepasa el poder político y repercute gravemente en las capas más desfavorecidas de la sociedad. Alaine Touraine expone hoy las conclusiones de este seminario.

El profesor Castell expuso sus tesis sobre la relación entre la nueva economía, la sociedad de la información y las instituciones. Afirmó que la globalización, en su expresión actual, es una reestructuración del sistema capitalista, posible "porque los Gobiernos han hecho una descentralización de los mercados y las empresas se han estructurado a través de sus redes para trabajar en el ámbito global". Esta nueva economía que ya está cambiando la sociedad, el trabajo y las relaciones interculturales, necesita a la educación "como factor esencial para la igualdad". Para ello, "hay que cambiar todo el sistema educativo y eso, que no ha abordado aún ningún país, llevará 20 años".Mientras Joaquín Estefanía cree que la globalización de la información está dividiendo el mundo entre los "enchufados y los desenchufados" a Internet, el profesor Castell aseguró que "con un tercio de la población que estará conectado hacia el 2005, eso ya no es un problema". El problema, a su juicio, será preparar a una población para que sepa lo que busca, cómo buscarlo y cómo se procesa la información". El sociólogo piensa que Internet igualará a la sociedad sólo si ya está previamente igualada.

La globalización económica, dijo Castell, se manifiesta, entre otras cosas, en las expectativas de crecimiento de los valores bursátiles más que en los dividendos que las propias empresas generan. Joaquín Estefanía abundó en esta idea y alertó de los peligros de estas nuevas formas económicas que causan un "extraordinario crecimiento de las desigualdades sociales y no sólo entre los llamados primer y tercer mundo", sino en el seno de las sociedades ricas, porque acarrean un enorme abanico de diferencias salariales "generado por la fórmula de las stock options".

Estefanía afirmó que no es el capitalismo lo que está en crisis, "sino la crítica al capitalismo", un sistema que ha perdido el miedo tras la caída del muro de Berlín en 1989 "porque ya no tiene enemigos". El periodista y escritor criticó la excesiva concentración del poder económico y la aparición de nuevas oligarquías "que tienen regalado el capital gracias a las privatizaciones". Alabó, sin embargo, el provecho que algunos países "emergentes" logran gracias a la globalización, pero recordó que "se está viviendo la nueva revolución del capitalismo, mientras hay ciudadanos que aún no tienen ni revolución industrial".

El seminario, que concluye hoy, fue inaugurado por el presidente Manuel Chaves, quien señaló que Andalucía perdió la revolución industrial, pero no puede perderse la de estas nuevas tecnologías.

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