'Las Meninas' inspiran el último estreno de Nacho Duato
El cuadro de Las Meninas, pintado por Diego de Silva y Velázquez, es la fuente de inspiración de una de las dos coreografías que la Compañía Nacional de Danza (CND), dirigida por Nacho Duato, estrena mañana y hasta el 4 de junio, en el Teatro Real de Madrid. Que nadie espere ver sobre el escenario rizos y miriñaques, aunque "sí un espejo", como advirtió ayer el bailarín y coreográfo durante la presentación de esta pieza, que ha titulado Ofrenda de sombras. "He recreado la experiencia personal y subjetiva, casi onírica, que me produce la contemplación de este cuadro, pintado por un artista que nos hizo ver el mundo, con sus cosas más simples, de otra forma," describió Duato. Para aderezar el collage de música de los siglos XVI y XVII -en manos del maestro especialista en viola da gamba y composiciones españolas de los siglos XII al XVII, Jordi Savall-, en medio de esas notas se intercala la música electrónica de Alberto Iglesias, que ha sampleado la grabación de un día entero de voces en la antigua sala de Las Meninas en el Museo del Prado. Así, se escucha a un ceremonioso guía japonés o a uno español que "con muy mal acento" intenta explicar la maravilla a un grupo de turistas franceses. Jordi Savall estará, en el foso, a cargo de las tres formaciones musicales de las que es responsable: la Capella Reial de Catalunya, Hesperión XXI y Le Concert des Nations.
Dos piezas anteceden esta Ofrenda de sombras en el programa, donde la música antigua es protagonista. La primera, Por vos muero, estrenada en 1996, escoge versos de Garcilaso de la Vega recitados por Miguel Bosé, que se combinan con canciones españolas de los siglos XV y XVI. "En aquella época, todo era danza, no como ahora, que es puro tecnicismo y ha perdido su carácter de celebración para cualquier asunto popular", explicó Duato. La segunda, Arcangello, estreno mundial como Ofrenda..., está basada en los Concerti Grossi de Corelli y en una trágica aria de Scarlatti. En ella se recrean el paraíso y el infierno,y el contraste nace de las melodías antiguas y los movimientos contemporáneos, que relatan la búsqueda de la liberación a través de la muerte.
Homenaje a Bach
Entre los días 7 y 10 de junio, la CND rinde homenaje a Johann Sebastian Bach, y para ello el propio Duato sale al escenario al principio y al final de este segundo programa -para el cual ya están las entradas en taquilla- titulado Multiplicidad, formas de silencio y vacío, estrenado en 1997.
"Entro y salgo de escena como para pedir perdón a Bach, cuyo homenaje se celebró el año pasado, por atreverme a entrar de esta manera en su obra", dijo Duato. Este montaje recibió en 1999 el Premio Benois de la Dance y el último Max de Danza. "Después de estos galardondes", bromeó Duato, " creo que Bach estará menos enfadado conmigo".
