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El elevado consumo lleva el déficit comercial de EEUU a otro récord

El déficit comercial de EEUU alcanzó de nuevo un récord el pasado mes de marzo como consecuencia de la combinación de un consumismo voraz y los elevados precios del petróleo vigentes ese mes. Según los datos del Departamento de Comercio difundidos ayer, el déficit comercial norteamericano alcanzó en marzo la cifra de 30.200 millones de dólares (5,59 billones de pesetas), un nuevo salto adelante del 5,1% desde los 28.700 millones de febrero. Éste ha sido el déficit más alto registrado en un solo mes.

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Las exportaciones norteamericanas crecieron de modo sensible en marzo, en especial las de semiconductores, equipos para telecomunicaciones, automóviles y maquinaria industrial. Reflejando la mejora general de la situación económica en el planeta, registraron ese mes una vigorosa subida del 2,9% y se situaron en la cifra récord de 87.300 millones de dólares (16,16 billones de pesetas). Pero más lo hicieron las importaciones de bienes y servicios, que aumentaron en marzo un 3,4%, hasta alcanzar la cifra de 117.400 millones de dólares (21,73 billones de pesetas). Pesó mucho en ese incremento el elevado precio del crudo, 26,38 dólares el barril, el más alto desde noviembre de 1990. Pero también crecieron hasta niveles de récord las compras de todo tipo de productos procedentes de Canadá, México, Europa y Japón. "Con una demanda que se mantiene tan robusta, es muy difícil reducir el déficit comercial", declaró ayer Kevin Flanagan, economista de la firma neoyorquina Morgan Stanley Dean Witter.

En el primer trimestre del año, impulsado por los niveles más bajos de desempleo en los últimos 30 años, el consumo creció en EEUU a una velocidad que no se conocía desde mediados de los ochenta. Los comercios, almacenes y puertos norteamericanos no dieron abasto para atender la fiebre compradora de una población que contempla su presente y su futuro con gran optimismo. Como muestra de esa actitud, el Departamento de Comercio subrayó ayer que las ventas de coches de importación ascendieron en marzo un 6,5%. Diversos economistas sostienen que el ahondamiento permanente del foso entre exportaciones e importaciones es uno de los talones de Aquiles de la expansión económica de EE UU. Ese foso, advierten, va a terminar traduciéndose en inflación.

El esfuerzo de Greenspan

Cinco subidas consecutivas, de un cuarto de punto cada una, de los tipos de interés de la Reserva Federal no habían conseguido frenar en marzo el consumismo de los norteamericanos. Ante el poco éxito de esa política, el organismo que preside Alan Greenspan optó el martes por un incremento de medio punto de su principal tipo de interés, que se situó en el 6,5%, su nivel más alto desde enero de 1991. Los bancos repercutieron de inmediato esa subida y situaron en el 9,5% el tipo de interés para particulares y pequeñas empresas.

Los datos de Comercio llegaron ayer, cuando los mundos de la política y los negocios de EE UU sostenían un vivo debate sobre la concesión a China del estatuto de socio comercial permanente. El déficit comercial de EE UU con el gigante asiático se redujo en marzo levemente, pasando de los 5.600 millones de dólares de febrero a 5.100 millones de dólares. En cambio, el déficit con Europa occidental creció desde los 3.500 millones de dólares de febrero hasta los 5.900 millones de dólares.

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