Aznar recibe a Chaves la próxima semana tras cuatro años sin reunirse
José María Aznar recibirá la próxima semana al presidente de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves, para abordar la financiación autonómica dentro de una ronda de contactos con presidentes autonómicos que ayer inició con el presidente de la Xunta, Manuel Fraga. Aznar no había recibido a Chaves en La Moncloa en cuatro años. El único precedente se remonta a junio de 1996. En esta ocasión se da, además, la particularidad de que Aznar recibirá a Chaves antes que a Jordi Pujol, con el que se entrevistará a mediados de junio.
El interés de Aznar por recibir a Chaves, con cierta premura en esta legislatura y tras su desinterés en la anterior, aparece vinculado a la pretensión del Gobierno de consensuar con los socialistas el nuevo modelo de financiación autonómica. El Ejecutivo, que ya no tiene la hipoteca nacionalista en esta legislatura, dispone de manos libres para pactar con los socialistas. Además, el PSOE gobierna ahora en seis de las 17 comunidades autónomas -Andalucía, Castilla-La Mancha, Extremadura, Asturias, Aragón y Baleares- frente a las tres de la anterior legislatura.Andalucía es la comunidad más emblemática de las gobernadas por los socialistas y, además, Chaves se ha convertido en líder del PSOE en esta etapa de provisionalidad como presidente de la gestora del partido.
Otro dato revelador es que Chaves será el segundo presidente autonómico que Aznar recibirá en La Moncloa, por delante de Jordi Pujol, con el que se entrevistará a mediados de junio.
Por otra parte, el modelo de financiación autonómica que defiende Chaves -la cesión de la cesta de impuestos a las comunidades autónomas- no se diferencia sustancialmente del que prepara el Gobierno con sus técnicos.
Pero ayer fue el pistoletazo de salida de la ronda de conversaciones de Aznar con los presidentes autonómicos, que tuvo como protagonista a Fraga, igual que hace cuatro años.
Aznar planteó al presidente gallego, en un encuentro de una hora de duración, su primordial preocupación: la necesidad de que las comunidades autónomas trabajen en planes de austeridad para lograr el objetivo presupuestario de déficit cero para 2001 que comprometió como una prioridad en su debate de investidura.
Fuentes gubernamentales manifestaron ayer que Aznar trasladó a Fraga, y lo hará con los restantes presidentes autonómicos, su pretensión de aumentar la corresponsabilidad fiscal entre el Ejecutivo y las comunidades autónomas, que al aumentar su capacidad de ingresos con el nuevo modelo de financiación, tendrá que ajustar sus gastos a aquéllos. "Con ello, el Gobierno ya no tendrá que subvencionar, como viene haciendo, a aquellas comunidades cuyo crecimiento en ingresos sea menor que el del PIB nominal", añadieron las fuentes gubernamentales.
Un reciente informe del Banco de España, publicado en abril por los medios de comunicación, llamaba la atención por el importante aumento de la deuda de las comunidades autónomas que podían poner en riesgo los planes de estabilidad del Gobierno.
