Iñaki Azkuna afirma que el Pacto de Lizarra ha resultado un fracaso

El alcalde de Bilbao, el peneuvista Iñaki Azkuna, afirmó ayer que la estrategia de acercamiento nacionalista entre el PNV, Eusko Alkartasuna y Herri Batasuna (HB) que culminó en el Pacto de Lizarra ha resultado un fracaso, porque ETA ha vuelto a asesinar y la coalición que lidera Arnaldo Otegi no se ha distanciado del terrorismo. Azkuna, que reconoció sentirse "engañado" por ETA, aseguró que HB se equivoca si pretende que Udalbiltza se convierta en el primer referente institucional de los vascos.

Respecto a los esfuerzos por recomponer la unidad nacionalista en un clima de recrudecimiento de la violencia, el alcalde de Bilbao manifestó, en un entrevista emitida por Radio Euskadi, que "hay muy pocas soluciones" con una organización que rompe la tregua y vuelve a matar, "que es lo único que sabe hacer". "Las cosas están clarísimas", añadió. "Nos han engañado y ha sido un fracaso". Azkuna remarcó que "con muertos, kale borroka y violencia no se puede hablar de política".El alcalde de Bilbao considera que Euskadi vive una situación de crispación que hay que recomponer a través del diálogo y por una decisión de mayorías, y culpó de la situación a ETA pero también a la incomunicación entre los partidos. Además, Azkuna subrayó que ETA ha conseguido "enfrentarnos a todos" y ha propuesto volver a estrategias basadas en el consenso y el diálogo entre las fuerzas democráticas. "Hay que hacer una recomposición de todo y lo primero es hablar con el que cada uno quiera. Sería muy bueno para el país que hablásemos con todos", sostuvo.

Por último, se ha mostrado en total desacuerdo con que Udalbiltza se convierta en el referente institucional para los vascos y ha dicho que Herri Batasuna se equivoca si pretende hacer de Udalbiltza una "asamblea constituyente que sustituya a las instituciones legalmente establecidas". Azkuna repitió su teoría de que Udalbiltza debe ser una institución que busque la colaboración cultural entre los diferentes territorios.

Por otra parte, el secretario general de EA, Gorka Knörr, criticó ayer al portavoz del PNV, Joseba Egibar, y al lehendakari, aunque sin nombrarlos expresamente, por hacer declaraciones sobre el futuro de las alianzas nacionalistas fuera del País Vasco. "No quiero ser impertinente pero parece que ha calado la costumbre de Aznar que habla en Chequia y en Marruecos y algunos se van a Madrid, poco menos que a desayunar para soltar lo que tienen que soltar aquí", dijo. "Nos tenemos por un partido serio y discreto y no nos parece muy correcto, cuando estamos trabajando y hablando, determinadas cuestiones, que yo entiendo importantes, pues poco menos que se suelten en desayunos", añadió.

A su vez, el dirigente y parlamentario socialista Jesús Eguiguren pidió ayer al lehendakari Juan José Ibarretxe, en un artículo publicado en Deia, que dé "un golpe de timón" a su política e intente consensuar con PNV, PP y PSE unos "mínimos comunes" que puedan frenar y darle la vuelta "a la situación de división que vive el país". Eguiguren cree que Ibarretxe no ha asumido hasta ahora su liderazgo y habla más como "un obispo" que como un dirigente político.