Acaba sin éxito el plazo para liberar a la mujer alemana retenida en Filipinas

La alemana Renate Wallert cumplió ayer 19 días de cautiverio a manos del grupo musulmán Abu Sayyaf sin que se hiciera realidad lo que parecía una fundada esperanza de liberación antes de la noche. Wallert fue secuestrada junto a otras 20 personas el pasado 23 de abril en la isla malaya de Sipadan y trasladada después a Jolo, en el sur de Filipinas. El precario estado de salud de Wallert y las conversaciones con sus secuestradores apuntaban a una liberación inmediata, antes que la de los demás rehenes.El ex embajador libio en Manila, Rajad Azzaruk, que actúa como negociador con el beneplácito de las autoridades filipinas, se declaró ayer, sin embargo, "esperanzado" en una pronta solución a la crisis de los rehenes en la isla de Joló.

En unas declaraciones a la prensa, Azzaruk indicó que las negociaciones con Abu Sayaf tienen básicamente una dimensión política -el establecimiento de un Estado musulmán en el sur del país- y que de momento no se han adelantado reclamaciones económicas. El negociador libio señaló que se deben establecer también algunas "garantías" para los secuestradores y sus familias y que Abu Sayyaf "no recurrirá a la violencia a menos que se vea acorralado".

Azzaruk desmintió ayer que los secuestradores hubieran pedido un rescate por la liberación de sus prisioneros como había informado una cadena de televisión filipina. Los extremistas musulmanes habrían reclamado ayer una compensación económica por los gastos que les supone la manutención de sus rehenes. Los rebeldes estarían exigiendo una cantidad de entre 1.200 a 1.700 dólares (entre 200.000 y 300.00 pesetas) por cada uno de los rehenes.