El atestado de la tragedia de Uharte no descarta una posible mala señalización
Los responsables del equipo instructor de la Guardia Civil que elaboró el atestado del accidente ferroviario ocurrido en Uharte Arakil (Navarra) el 31 de marzo de 1997 no descartaron ayer, en la primera sesión del juicio, que el tren accidentado, el intercity Miguel de Unamuno que cubría la ruta Barcelona-Irún, hubiera tenido, tal como sostienen los maquinistas, una señal de vía libre en el acceso a la estación. La señal de avanzada fue rebasada a 140 kilómetros por hora instantes antes de descarrilar en la estación de Uharte ante una súbita orden de parada con un cambio de vía que causó la muerte de 18 pasajeros y heridas graves a otros 155.
El juicio por la catástrofe ferroviaria más grave de las últimas décadas en España se inició en la Audiencia de Pamplona con el testimonio contrapuesto sobre las señales ofrecido por los dos acusados -el maquinista, Juan José García Fernández, y su ayudante, Miguel Ángel Marinetto, que aseguran que recibieron órdenes contradic-torias- y por el jefe de la estación, Juan Carlos González García.La fiscalía pide para los dos encausados cuatro años de prisión por 18 presuntos delitos de homicidio por imprudencia grave, uno de aborto, 69 de lesiones y 6 faltas de lesiones, así como el pago por Renfe de indemnizaciones por valor de 448 millones de pesetas, muchas de las cuales ya han sido abonadas. Las acusaciones consideran que los maquinistas no vieron las señales debido a un error humano. Éstos reconocieron ayer que en el último momento accionaron incorrectamente el freno directo del tren, lo que propició el descarrilamiento según los informes técnicos. El frenado de emergencia hubiera minorado el impacto.
El maquinista y su ayudante reiteraron sus declaraciones sumariales, en las que siempre han afirmado que la denominada señal de avanzada, que antecede a la señal de entrada de cualquier estación, dio vía libre al convoy y que poco después, en la señal de entrada a la estación de Uharte, se encontraron con una orden que les obligaba a parar.
"Creí que nos matábamos", relató ante la juez el maquinista del intercity. "No recuerdo nada, sólo que me agarroté", añadió Juan José García, un maquinista con 17 años de experiencia en Renfe, que aseguró ante la sala que la compañía nunca les ha preparado para situaciones de emergencia de este tipo. Al igual que su ayudante, no supieron explicar cómo pudieron encontrarse con dos señales contradictorias seguidas y por qué, pese a todo, no frenaron en los casi 500 metros de distancia existentes entre el avistamiento de la señal de entrada a la estación, que todas las partes coinciden en que ordenaba la parada del tren, y el cambio de agujas en el que se produjo el descarrilamiento, al que el convoy debía haber llegado a 30 kilómetros por hora.
El ayudante Miguel Ángel Marinetto, con doce años de experiencia como auxiliar, coincidió con su compañero. Recordó que ambos había iniciado su conducción en la estación de Castejón (Navarra) y que al ver la señal de avanzada en vía libre y segundos después verse obligados a parar bruscamente, sufrió un bloqueo. "Desconozco cómo reaccioné. No lo recuerdo. No tengo conciencia de haber actuado de una u otra forma", manifestó Marinetto. "Sólo recuerdo que la señal de avanzada nos daba vía libre", continuó, "y que eso nos produjo una cierta relajación porque era imposible que hubiese una orden de parada a continuación". Pero la había, y se produjo la catástrofe.
El jefe de la estación de Uharte Arakil, que sigue ocupando su puesto en esta localidad, aseguró que la señal de avanzada estaba en anuncio de parada cuando el Miguel de Unamuno la rebasó. La Guardia Civil comprobó al día siguiente el correcto funcionamiento de los tornos mecánicos que regulan las señales en la estación, y corroboró que los movimientos de vía libre y parada correspondían a giros incompatibles. "Presencié el descarrilamiento desde el andén", recordó Juan Carlos González. "Y cinco minutos antes las señales de parada ya estaban colocadas", añadió el jefe de estación de Uharte.
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