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Las instituciones detectan un máximo en el nivel de ozono insólito e inquietante

Fuenlabrada triplicó de madrugada el nivel de ozono que se considera peligroso para la salud

Vicente G. Olaya

El ozono troposférico, un gas que puede resultar nocivo para la salud y que se forma en las capas bajas de la atmósfera por la combinación de radiaciones solares y contaminantes (óxido de nitrogeno) producidos por coches e industrias, alcanzó en la madrugada del viernes al sábado unos níveles insólitos e inquietantes.La Consejería de Medio Ambiente de la Comunidad de Madrid y la Concejalía de Medio Ambiente de la capital emitieron ayer un comunicado en el que señalaban que sus estaciones de medición habían registrado en la madrugada del viernes al sábado níveles máximos desconocidos hasta entonces en la región y situados muy por encima de los establecidos en la normativa vigente para declarar la alerta entre la población por riesgo grave para la salud. El límite para esa declaración está en 360 microgramos por metro cúbico de aire. En la estación de Coslada, la Comunidad detectó 421 microgramos a la una de la madrugada. En horas sucesivas, los níveles máximos se desplazaron hacia el sur y llegaron hasta Fuenlabrada, Getafe, Leganés y Alcorcón. En Madrid, la estación de la Casa de Campo registró a las ocho de la mañana 471 microgramos. Pese a ello, las instituciones no declararon la alerta entre la población.

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La red regional de estaciones medidoras llegó a señalar que se había superado, en más de un 300%, el nivel a partir del cual las autoridades medioambientales decretan la situación de alerta (véase gráfico). El ozono troposférico se suele producir en los días soleados y muy calurosos por la incidencia de los rayos solares sobre la contaminación urbana. La madrugada del viernes al sábado en Madrid tuvo suaves temperaturas y lluvias que despejaron la contaminación de la región. A pesar de ello, la estación medidora de Coslada dio la voz de alarma a la una de la madrugada. Sus indicadores señalaban a esa hora 421 microgramos de ozono por metro cúbico de aire, un nivel 10 veces superior al considerado lógico para esas horas (en torno a los 40 microgramos). El decreto regional de 1997 que regula las medidas que hay que tomar cuando se incrementan notablemente los niveles de ozono establece en 180 microgramos el nivel de información a la población (para que los niños, los ancianos y los asmáticos no salgan a la calle ante posibles problemas respiratorios) y en 360 microgramos la situación de alerta (cuando hay grave riesgo para la salud de los ciudadanos).

Fallo en los medidores

"Lo primero que pensamos cuando recibimos los datos", reconoció ayer el consejero de Medio Ambiente, Carlos Mayor Oreja, "es que se había producido algún tipo de fallo en los medidores de la estación de Coslada, pero pronto nos dimos cuenta de que funcionaba perfectamente, porque el resto de estaciones también comenzó a señalar niveles sorprendentes". Los indicadores de la estación de Leganés se dispararon hasta los 429 microgramos, los de Getafe alcanzaron los 227, Móstoles llegó a 218 microgramos, Alcorcón a 479 y Fuenlabrada batió, a las cuatro de la madrugada, todas las marcas conocidas en Madrid y posiblemente en España: 1.133 microgramos de ozono por metro cúbico de aire. "No sabemos lo que ha podido pasar. El ozono troposférico se produce generalmente en los días calurosos del verano y cuando los niveles de contaminación son muy elevados. Estos niveles tan disparatados, de noche y con temperaturas frescas, son inconcebibles", indicó Mayor Oreja. Según el consejero, desde que existe la red de estaciones medidoras de ozono, la mayor concentración de este gas registrada en Madrid era de 240 microgramos.

La Consejería de Medio Ambiente encargará "a los mayores expertos en ozono" que analicen este fenómeno. "No se puede descartar que tenga un origen natural, pero tampoco que haya sido producido por algún foco contaminante", indica el consejero. Por su parte, el concejal de Medio Ambiente de Madrid, Adriano García-Loygorri, calificó ayer de "asombroso" el fenómeno ocurrido en la noche del sábado. "En cualquier caso, la situación ha sido puntual, temporal y pasajera, sin que haya existido riesgo para la salud de la población, puesto que los periodos de exposición han sido muy cortos y se han producido en horario nocturno, cuando la mayor parte de la población no estaba expuesta a este contaminante por estar en su casa o en sitios cerrados", señaló García Loygorri. Ecologistas en Acción, a través del portavoz Juan García, pidió la dimisión del concejal por no avisar a la población cuando se produjo el incidente, sino un día después y porque desde enero no les envían partes sobre la situación del aire..

Para rebajar los niveles de ozono "se puede llegar a prohibir la circulación y obligar, por ejemplo, a la gente a permanecer en casa", explica Mayor Oreja. "En este caso, no ha sido posible. Primero, porque no había contaminación que reducir y, en segundo lugar, porque todo el mundo estaba en casa y durmiendo, tal y como se recomienda en estos casos", reconoció el consejero. "En el servicio de urgencias 112", explicó Carlos Mayor Oreja, "no se registraron llamadas por problemas respiratorios derivados del incremento del gas". El 061 del Insalud y el Samur del Ayuntamiento tampoco atendieron ninguna urgencia especial que pudiera estar relacionada con el aumento de ozono.

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Sobre la firma

Vicente G. Olaya
Redactor de EL PAÍS especializado en Arqueología, Patrimonio Cultural e Historia. Ha desarrollado su carrera profesional en Antena 3, RNE, Cadena SER, Onda Madrid y EL PAÍS. Es licenciado en Periodismo por la Universidad CEU-San Pablo.

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