Un trámite pendiente del futuro ministro

Las miles de alegaciones presentadas al estudio informativo elaborado por el Ministerio de Fomento sobre los posibles trazados de la línea de alta velocidad entre Madrid y la Comunidad Valenciana constituyen una de los primeras ocupaciones que tendrá que afrontar el futuro ministro del ramo. Las alegaciones se sistematizarán antes de trasladarlas a un segundo equipo del Gobierno, el de Medio Ambiente, a quien corresponde elaborar la declaración de impacto ambiental de los diversos trazados posibles.La voluntad política de impulsar el tren de alta velocidad entre Madrid y la Comunidad Valenciana tendrá mucho que ver con la celeridad de los trámites. Pero las inversiones en curso para conectar Madrid y Barcelona vía Zaragoza, o Madrid y la cornisa cantábrica vía Valladolid ponen en entredicho la capacidad de maniobra de Fomento durante la legislatura recién estrenada.

Eduardo Zaplana, presidente de la Generalitat, despidió formalmente a Rafael Arias-Salgado, actual ministro de Fomento en funciones, cuando le recibió hace dos semanas en el Palau para firmar un convenio sobre la rehabilitación de la oficina central de Correos en Valencia. "Mi mayor deseo es que en la libreta de Aznar aparezca el nombre de Arias-Salgado como ministro de Fomento", comentó Zaplana con evidente sorna.

Bromas y veras

La declaración del presidente choca frontalmente con una broma de la que ha sido objeto recurrente Rita Barberá, alcaldesa de Valencia: "Tenemos mayoría absoluta en el Ayuntamiento, mayoría absoluta en la Generalitat, ahora también tenemos mayoría absoluta en el Congreso... pero Rafael Arias-Salgado seguirá siendo ministro de Fomento".

Durante los últimos años, las inversiones de Fomento en la Comunidad Valenciana han seguido una trayectoria descendente tanto en números absolutos como relativos respecto de otras regiones del Estado. Arias-Salgado ha logrado incomodar a varios representantes públicos de la Comunidad Valenciana y no ha demostrado especial simpatía hacia la región, pero no se descarta que efectivamente repita en el cargo y siga ejerciendo como un freno al denominado poder valenciano.

El futuro responsable de Medio Ambiente también tiene mucho que decir sobre el futuro tren de alta velocidad. El protagonismo que pretenda ejercer sobre el caso será decisivo para dilatar los plazos de ejecución de las obras a través de las declaraciones de impacto ambiental que, desde luego, no será pequeño. Todo un reto para la capacidad de influencia de Zaplana.